El Ayuntamiento de Guardamar ha comenzado hoy la segunda fase de los trabajos de dragado del cauce nuevo de la desembocadura del río Segura a la altura del muelle pesquero. El objetivo de esta actuación concreta es extraer los sedimentos en puntos determinados y crear con ello un canal de acceso para una plataforma flotante o pontona que pueda trabajar desde dentro del cauce con una retroexcavadora.

Los trabajos están siendo ejecutados por una excavadora de gran tamaño que está retirando las arenas del río, las cuáles son depositadas a continuación en camiones de gran tonelaje. Posteriormente son vertidas de manera provisional en un depósito excavado en una parcela municipal situada a escasos metros del puerto.

El concejal de Obras, José María Hernández, explica que los trabajos iniciados hoy son fundamentales para ejecutar el proyecto en su totalidad ya que el aterramiento del Segura y la falta de profundidad impiden la navegación. "Abriendo el canal se podrá llegar a todos los puntos donde hay que retirar las arenas posibilitando que el cauce sea de nuevo navegable y utilizado por embarcaciones pesqueras y de recreo" subraya el concejal.

El proyecto en ejecución prevé que sean extraídos aproximadamente unos 20.000 metros cúbicos de sedimentos depositados en el cauce del río debido a los aportes arenosos del oleaje, de las mareas marítimas y del Segura. El calado actual de la zona de actuación es menos de un metro. Con los trabajos en marcha se espera conseguir una profundidad de entre dos y 3,5 metros.

El coste de la operación es de 302.000 euros procedentes del ayuntamiento de Guardamar y se espera que finalicen en unos dos meses, según José María Hernández.

Para la ejecución del dragado se cuenta con los informes ambientales favorables de la Conselleria de Medio Ambiente, Servicio Provincial de Costas y Confederación Hidrográfica del Segura entre otras administraciones.