Es la tercera vez, desde septiembre, que una DANA afecta a la Vega Baja. Las peores consecuencias fueron las de aquellos fatídicos días entre el 12 y el 14 de septiembre. La gota fría de octubre pasó rozando la comarca, sin mayores consecuencias y, ayer la Vega Baja se preparaba ante la inminente llegada de otra que, afortunadamente, no ha sido tan grave como la de septiembre. Las lluvias, eso sí, han sido muy intensas durante toda la noche y han provocado problemas en algunas localidades costeras, como Torrevieja, donde tuvieron que cortarse varias calles por inundaciones, como también sucedió en Orihuela Costa. En Pilar de la Horadada, el túnel de la AP-7 volvió a sufrir problemas de acumulación de agua, como en septiembre cuando se inundó por completo protagonizando una de las imágenen más espectaculares de aquella DANA, aunque esta vez la inundación solo afectó al carril derecho y parte del izquierdo en dirección a Cartagena por la cascada de agua que entraba. La Guardia Civil de Tráfico cortó ese carril derecho durante una hora y desvió todo el tráfico por el izquierdo, hasta que el alcantarillado pudo asumir todo el agua al debilitarse las precipitaciones.

En total, en la Vega Baja han caído entre 40 y 90 litros por metro cuadrado en 24 horas. Durante la noche se han alcanzado, en algunos municipios, los 20 litros por metro cuadrado en una hora. Las lluvias se han debilitado esta mañana, donde el protagonista está siendo el viento y el fuerte oleaje.

En Torrevieja, anoche tuvieron que cortarse las Avenidas de las Cortes Valencianas, Delfina Viudes y Alfredo Nobel debido a las intensas lluvias, y esta mañana solo ha permanecido cortada la entrada y salida de la N-332 en las Salinas.

En Orihuela Costa, una de las zonas más afectadas ha sido la playa de Cala Bosque, en La Zenia. Allí se ha visto dañado parte del mobiliario, como los lavapiés, y parte de la arena ha desaparecido por el arrastre de agua de lluvia que desemboca en este arenal.

Meteorología mantiene la alerta amarilla y también hay temporal marítimo con la previsión de que las olas puedan alcanzar los cuatro metros, por lo que Aemet ha declarado la alerta naranja