Ribera Salud celebró el décimo tercer aniversario de la apertura del Hospital Universitario de Torrevieja y la gestión del departamento de salud dando por hecho que tiene por delante -al menos- 7 años de concesión más. Dos hasta agotar el contrato de quince años en 2021, y otros cinco de prórroga. La gerente, Eva Baró, y el adjunto a la gerencia, David Zafrilla, indicaron ayer que la concesionaria no lo concibe de otra forma porque los datos avalan la gestión de calidad del centro sanitario y la Generalitat no tiene, a su juicio, argumentos para justificar la recisión cuando culmine el contrato, el 21 de noviembre de 2021. La Generalitat ha señalado con claridad que quiere que el departamento sea gestionado de forma directa por la Conselleria de Sanidad.

Por su parte, el alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón (PP), defendió el modelo de gestión público-privado. «No es una defensa de una mercantil -aclaró- es la defensa de una gestión que se ha demostrado con datos que es mejor que las demás, en algo que también señalan los pacientes». Dolón aclaró que cuando consiga mantener una reunión con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig su primera reivindicación será la prórroga de la concesión. Reunión que el primer edil de la quinta ciudad de la Comunidad no ha logrado que la Generalitat concrete en cinco meses.

A juicio de Dolón, secretario provincial del PP, partido que impulsó la creación del modelo público-privado en los años 90, el rescate del primer centro concesionario, el Hospital del Alzira se ha demostrado muy poco beneficioso para pacientes y los trabajadores de ese centro. Para la gerencia de Ribera Salud, la Generalitat no debería preocuparse por generar más problemas -como sería extinguir el contrato en 2021- y podría centrarse en prioridades de asistencia socio sanitaria del ámbito del departamento. La directora del departamento fue especialmente explícita: el hospital ingresa anualmente a 200 pacientes que al ser dados de alta no tienen un lugar donde culminar su rehabilitación. Faltan muchas plazas de residencias para personas mayores, que no cuentan con apoyo familiar, o están solas.

Diez médicos más

En concreto, la directora citó el caso de una persona mayor que ha estado «viviendo» en el centro año y medio porque no existen plazas asistenciales especializadas públicas. Algo que, reiteró ayer Dolón, corresponde al área de la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, quien con más convicción defiende el regreso del departamento al sistema público. Para Ribera Salud la Generalitat debería aprovechar el ahorro anual de un 30% en comparación con departamentos de similares características en la Comunidad que supone para las cuentas públicas la gestión que realiza la concesionaria -avalada en una auditoria de la Sindicatura de Cuentas- en dotar esta infraestructura de apoyo sociosanitario.

La relación entre Ribera Salud y la Generalitat no es mala. Es peor. Algo que se reflejaba en un día que ya es tradición que sea de celebración y encuentro para muchos de los trabajadores del hospital. Sin representantes de la Generalitat -que es la administración que sostiene con su presupuesto la concesión-, ni tan siquiera la presencia del comisionado del Consell, el cargo que supervisa la correcta ejecución del contrato en el propio departamento y elegida por la Generalitat.

Eduardo Dolón explicó que ha solicitado algunas mejoras al departamento de Torrevieja, en especial para la Unidad de Conductas Adictivas, mientras que el director adjunto explicó que la gerencia está centrada en subsanar uno de los escasos puntos débiles que la famosa auditoría cita en su informe sobre el funcionamiento del departamento: el elevado cupo de pacientes por médico de atención primaria que supera los 1.800. Con ese objetivo se está llevando a cabo un proceso de selección de nuevos facultativos para reforzar centros de salud y atender bajas. En total diez nuevos médicos entre todos los centros que podrían incorporarse a lo largo de los dos primeros meses del año 2020. Este reto en atención primaria, el de hallar profesionales, se suma al del envejecimiento de la población residente.

16.541 nacimientos y el trabajo de un 70% de mujeres

El Hospital Universitario de Torrevieja inició su andadura el 21 de noviembre de 2006 con un recorrido protagonizado por el entonces presidente de la Generalitat, Francisco Camps, el conseller de Sanitat, Rafael Blasco y el alcalde Pedro Hernández. Durante todos estos años, el Hospital ha logrado consolidar sus equipos de trabajo y «mantener unos excelentes indicadores asistenciales», como el de las listas de espera, según Ribera Salud. El departamento se encuentra en un proceso de renovación de alta tecnología diagnóstica que culminará en los próximos años.

«Hemos renovado endoscopios, toda la dotación de quirófano, resonancia así como diferentes infraestructuras. En los próximos años ampliaremos nuestro compromiso de inversión», aseguró José David Zafrilla, director Adjunto a Gerencia.

Estos son algunos datos de balance de estos 13 años: 211.532 intervenciones quirúrgicas, 3.243.595 consultas externas hospitalarias, 14.832.795 visitas a atención primaria, 957.205 urgencias hospitalarias, y 16.541 nacimientos. Un trabajo sostenido por una plantilla formada por 1.300 profesionales distribuidos en el hospital y centros de salud de diez municipios, el 70% mujeres.