El Ayuntamiento de Orihuela tiene previsto intervenir en la consolidación de los restos de muralla del Castillo, que actualmente están en ruinas. El consistorio invertirá 128.367 euros en los trabajos contemplados en el Plan Director del Castillo cuyo documento lo va a llevar a pleno para su aprobación el equipo de gobierno «muy pronto», según avanzó ayer el edil de Patrimonio Histórico, Rafael Almagro.

Los trabajos en la muralla serán de consolidación de los restos que hay en un tramo de unos 60 metros entre la Torre Taifal y el Seminario. A pesar de que parte de esa muralla está muy deteriorada y ha desaparecido parte de la misma, no se va a llevar a cabo una reconstrucción volumétrica al no permitirlo la Dirección General de Patrimonio de la Generalitat. En las zonas donde la muralla haya desaparecido se dejará constancia de que allí hubo en su día una parte de la misma. «Es otra de las actuaciones urgentes que recoge el Plan Director cuyo fin es consolidar las ruinas del Castillo, protegerlas y considerar todo el entorno como un parque arqueológico visitable», indicó Almagro. Las obras serán una continuación de las que se están acometiendo en la Torre Taifal y que finalizarán a finales de noviembre, momento en el que se iniciarán los trabajos en la muralla. El arquitecto de la empresa adjudicataria, José María Germán de Galiano Garrigós Arquitectos, explicó que «se va a remarcar especialmente el arranque de la muralla y se rematará para evitar su degradación».

En cuanto a las obras en la Torre Taifal, iniciadas el pasado verano y para lo que fue necesario el uso de un helicóptero para llevar hasta allí el material -que hizo un centenar de viajes con una tonelada de material en cada uno-, están muy avanzadas y queda completar parte de las almenas. El arqueólogo municipal, Emilio Diz, indicó que «se han localizado agujas de madera durante estos trabajos, cuyo análisis nos puede ayudar a contextualizar mejor este elemento patrimonial». En estas obras de la torre se han invertido 84.256 euros, 40.000 de ellos de una subvención de la Generalitat. «Las obras van a cambiar la fisonomía de la torre que tenía un hueco grande por el impacto, probablemente, de un cañón y se va a cerrar», explicó Almagro, quien hoy se reúne en València con el director territorial de Cultura, José Antonio López para tratar el Plan Director y cómo poner en valor el recientemente adquirido por el Ayuntamiento, yacimiento íbero de Los Saladares.

Restos humanos

El Ayuntamiento también adelantará los trabajos previstos de excavación en el Castillo tras la aparición de restos humanos -un cráneo- hace unos días, que quedaron al descubierto por las intensas lluvias de septiembre. El hallazgo fue localizado por un senderista, Rodrigo Terrés, y, según avanzó ayer Rafael Almagro, se podría tratar de los restos de uno de los soldados del regimiento Madrid que perdieron la vida en 1707 tras la explosión «bien del impacto de un rayo o de un acto de guerra entre castellanos y aragoneses», aunque esperará la confirmación definitiva del juzgado que analiza estos restos. «Sabemos que hay huesos enterrados de unos 70 soldados, cuyos cuerpos no se pudieron recuperar enteros», dijo el edil quien instó a quienes se acerquen al Castillo «a que no toquen nada que vean».