El Ayuntamiento de Daya Nueva trasladó ayer para su sacrificio a 60 cerdos vietnamitas de una finca situada en la calle La Bodega, en el casco urbano. Dos asociaciones animalistas, Dignidad Animal y Animal Feel, intentaron por todos los medios evitar que se llevara a cabo la orden de desalojo y plantearon como alternativa el traslado de los animales a un albergue animal madrileño específico para esta especie. Sin éxito.

La alcaldesa Teresa Martínez (Cs) indicó que el Ayuntamiento ha actuado en función de las directrices de la Conselleria de Medio Ambiente. «Este es un problema arrastramos tres años y que se ha agravado con la riada y el total abandono de los animales por parte del dueño». La venta de esta especie está prohibida desde marzo como animal exótico e invasivo. Algo que no implica necesariamente su sacrificio en caso de abandono, según los animalistas.