Antes de que Dolores fuera creado como pueblo, en sus tierras se asentaba una majada, el lugar donde pasa la noche el ganado y se albergan los pastores. De ahí el apodo gentilicio que reciben los habitantes de este municipio y también razón por la que estos orígenes se conectan con lo que el parque de la Alameda acoge este fin de semana, la Feria de Ganado de Dolores (FEGADO).

Desde Galicia, Mallorca, Valencia, Barcelona y varios rincones de Andalucía se han desplazado ganaderos y yeguadas para participar en un evento que reúne varios elementos de exclusividad en el sector. La Feria ofrece el único mercado de ganado de la Comunidad Valenciana, donde en 70 corraletas se da la compraventa de burros, ovejas, caballos y bueyes. También es el único concurso morfológico de caballos de pura raza española junto al de Valencia de toda la región.

En este concurso se valora el paso del caballo, el galope, el trote y la parada, donde en esta se juzga la morfología. Es la cita más importante y vistosa de toda la programación. En ella participan 50 caballos.

A medio día de ayer, los ganaderos ultimaban los detalles para que todo estuviera listo para el inicio de la cita programada para las 18 horas. Hay distintas modalidades en el espectáculo ecuestre. Las gradas de la pista principal rebosan con la asistencia de unas 3.000 personas.

«El nivel ha subido respecto a otros años» apuntaba ayer David Deves, ganadero local. Deves se refiere entre otros al caballo Zarzuela Simia, vigente subcampeón del Campeonato del mundo de caballos de pura raza española celebrado en Valencia y Oria de Vida, que quedó en quinta posición.

Esta Feria cuenta con un doble perfil de visitante, claramente diferenciado. Por un lado, expertos en el sector y aficionados del mundo ecuestre que no se pierden una cita de gran repercusión a nivel regional y nacional. Y por otro lado, también atrae a un perfil familiar para disfrutar de jornadas donde el caballo es el protagonista pero con la presencia y exhibición de otros animales, como la exhibición canina, de esquiladores y espectáculos como el de doma alta .

El año pasado, el parque la Alameda, recinto donde cada año acoge esta Feria, atrajo a 35.000 personas en los cuatro días que duró el evento. Esta edición, la concejala de fiestas, Raquel Sirvent, estima que esa cifra se supere de forma notable. La relevancia del evento se refleja en la repercusión en el municipio. «Dolores no se concibe sin FEGADO» apunta la concejala. «No solo repercute en el municipio, también en los de alrededor por la ocupación en los hoteles» señala la organizadora y secretaria de FEGADO, Lidia Sánchez.