Los grupos de la oposición del Ayuntamiento de Los Montesinos nunca han tenido despacho en la Casa Consistorial para atender las demandas de los vecinos. Desde que el municipio se segregó de Almoradí hace casi 29 años, el partido en el gobierno y el acalde, con sucesivas mayorías absolutas, es el mismo: el PSOE de José Manuel Butrón. Izquierda Unida, con un edil en este consistorio ha lamentado esta situación que califica de «anormalidad democrática» para un municipio de cinco mil vecinos. «No sucede lo mismo en la inmensa mayoría de ayuntamientos de la Vega Baja, como nuestro vecino San Miguel, donde todos los grupos políticos disponen de su despacho? deberíamos tomar ejemplo», en palabras del concejal de IU-Unidad Trabajadora, Alfonso Paredes. «Somos un grupo municipal que está en la oposición pero que tiene derecho a disponer en la sede del Ayuntamiento de un despacho o local para reunirse de manera independiente y recibir visitas de los ciudadanos». Algo, recuerda el edil, que fija la normativa, «con acierto, porque el Ayuntamiento es de todos los grupos municipales y no sólo del grupo de gobierno». Según la misma fuente, el alcalde José Manuel Butrón ha negado a los grupos municipales de la oposición el despacho alegando «que están todos los despachos ocupados», cuando, a juicio de la formación de izquierdas, «en realidad no existe voluntad política de que los otros grupos puedan hacerse visibles en el Ayuntamiento y con la finalidad de tener ellos la exclusiva». IU cree que el PSOE -que ha vuelto a revalidar una holgada mayoría absoluta-ha tenido 28 años «para realizar las actuaciones pertinentes para dar despacho al resto de grupos municipales en el Ayuntamiento.Es una prueba más de que se cree ser dueño y señor del pueblo y del ayuntamiento». Paredes ruega «un cambio de talante en el gobierno y obtener una respuesta positiva a la solicitud».

El PSOE no se ha pronunciado sobre esta reclamación de IU. El Ayuntamiento cuenta con una distribución de los despachos singular y rara: los despachos son circulares y escasos y abundan las zonas comunes aparentemente sin uso. Los técnicos comparten oficinas muy reducidas y el salón de plenos se usa para la realización de cursos. En este pequeño Ayuntamiento, con cuentas saneadas por la actividad urbanística, agrícola e industrial, ano conocen el pladur, los alquileres o las obras de ampliación.