Las fiestas de la Reconquista del Centro Ocupacional del Oriol cuenta con todos los detalles. Bandeloras que simulan las calles de la ciudad, un escenario decorado como el balcón principal del Ayuntamiento, un estandarte simulando la enseña del Oriol -todo elaborado por ellos mismos a mano- y todos los cargos que forman parte de las fiestas de moros y cristianos.

Un calor extenuante no impedía ayer que casi sesenta usuarios del centro protagonizaran una escenificación de la exhibición pública de la enseña, representaran un breve pasaje de la leyenda de la Armengola y finalizaran con la entrega de obsequios a sus homólogos de los cargos de la Asociación.

El desfile del bando moro y el cristiano fue uno de los momentos más aclamados. Cada bando contaba con cuatro filás, con su correspondiente cabo y ataviados con trajes. Familiares, festeros, miembros de la corporación municipal llenaban el patio del centro para no perderse uno de los actos más emotivos de las fiestas. El público, muy participativo y entregado respondía con sonoros aplausos a cada uno de los envites que los cabos les lanzaban.

Durante todo el año preparan cada uno de los actos que esperan con gran ilusión y que ven recompensados con los calurosos aplausos que reciben además de en cada una de las intervenciones que hacen desde el balcón del Ayuntamiento simulado.

Desde que se abrió el centro en 1996 forman parte de la programación de las fiestas de Orihuela.