El Instituto Geográfico Nacional sitúa tanto la calle Infante Elena como el Barrio de las Casas Baratas dentro del término municipal de Rafal. Son la vía y la barriada oriolanas cuya soberanía se disputan desde hace unas semanas Rafal y Orihuela, con conflicto de delimitación de término incluido y plenos en uno y otro municipio para anexionarse uno la zona y para defender el otro su territorio. Pero en esta lucha parece David (Rafal) puede ganar a Goliat (Orihuela). El Centro Nacional de Información Geográfica, dependiente del Ministerio de Fomento, establece que los límites actuales no están bien definidos y que al pequeño municipio de Rafal le falta término. En concreto, la calle y el barrio en conflicto estarían dentro del linde de Rafal y no en Orihuela, como hasta ahora está, incluso en los planes generales de ambos municipios.

Así lo indica el informe técnico encargado por el ayuntamiento rafaleño y que se ha basado tanto en los datos del Instituto Geográfico Nacional, como en el documento de 1896 firmado por el entonces alcalde pedáneo de El Mudamiento y por el que fuera ese año regidor de Rafal en el que se establecen los mojones. Mediante una ortofoto actual, junto con ese documento, la técnico ha podido establecer las lindes de los términos municipales de Rafal y Orihuela, y delimitar la línea que sitúa claramente a la calle Infanta Elena dentro del término rafaleño, así como a las Casas Baratas. En el caso de la calle, el PGOU de Orihuela establece que la mitad de la vía es suya y la otra mitad del vecino; sin embargo, en el PGOU de Rafal lo que sería de ese municipio es la calzada y la acera de la localidad vecina. Un lío en toda regla por tan solo 7 metros que ha abierto una guerra abierta entre los dos municipios avivada al borrar el alcalde de Rafal, el socialista Manuel Pineda, unas líneas de aparcamiento que había pintado el ayuntamiento oriolano, dirigido por el popular Emilio Bascuñana. Según el IGN, toda la vía es rafaleña.

En el caso del Barrio de las Casas Baratas la pelea por su soberanía puede acabar en los juzgados. El Ayuntamiento de Rafal ha iniciado el oficio para anexionarse esta barriada situada en la pedanía oriolana de El Mudamiento. Lo hace después de que sus vecinos se hayan dirigido en varias ocasiones al Ayuntamiento de Rafal expresando su deseo de pertenecer a este municipio. El oficio lo inició el consistorio rafaleño el pasado mes de febrero. Tras un período de alegaciones, en marzo, casi en el límite de tiempo, las presentó el Ayuntamiento de Orihuela. Sin embargo, estas alegaciones no pasaron por el pleno como marca el procedimiento administrativo, hasta esta misma semana, después de que hayan sido desestimadas por Rafal, quien el pasado viernes aprobó en pleno elevar el expediente a la Dirección General de Administración Local, dependiente de la Conselleria de Presidencia de la Generalitat, quien lo pasará al Consell Jurídic Consultiu y al Consell de Delimitació Territorial.

El alcalde de Rafal, Manuel Pineda, señaló ayer a este diario que «lo que ha hecho el Ayuntamiento de Orihuela no sirve para nada porque ya desestimamos las alegaciones y esa desestimación es la que elevamos a València porque nos corresponde a nosotros, y Orihuela, por una negligencia, no ha hecho las cosas bien». Pineda anuncia que acudirá a la Subdelegación del Gobierno, competente en materia de seguridad, para que tome cartas en el asunto respecto a que entre una y dos patrullas de la Policía Local de Orihuela estén permanentemente en la calle en conflicto. «Lo que hay que hacer es negociar políticamente pero no mandando policías», se queja. De hecho, no en todo sale perjudicada Orihuela en esos lindes que marca el Instituto Geográfico Nacional, ya que en la parte noroeste de Rafal hay territorio que debería pertenecer a Orihuela según las lindes marcadas. «Habría que volver a colocar los mojones como estaban en 1896 y como indica el Centro Nacional de Información Geográfica y sentarnos a los dos municipios, tras hacer sendas coimisiones técnicas, para volver a establecer los límites».

Según el informe técnico, la fábrica conservera que paga licencia de actividad en Orihuela, también estaría en término de Rafal, así como parte del polígono industrial. Precisamente, uno de los principales conflictos de la calle Infanta Elena es que pasan por allí los camiones que van a la fábrica, «invadiendo» término de Rafal.