Deprisa, deprisa. El equipo de gobierno de coalición de izquierdas está protagonizando un auténtico sprint final para que parte de su labor de gestión en el área de Contratación se resuelva antes de las elecciones. El tortuoso paso de tortuga de cuatro años se ha convertido, de la noche a la mañana, en carrera de felinos para cerrar todos las prestaciones que carecían de contrato. En una comparecencia que se presumía no electoral la edil de Protección Animal, Carmen Morate (Los Verdes) anunció ayer la adjudicación inminente (a falta de recibir la documentación de la empresa) del primer lote y más importante de los servicios veterinarios del albergue animal por 92.091 euros anuales, IVA incluido. Entre otros servicios, este lote incluye analíticas, vacunas, alimentación específica, esterilización y castración de perros y gatos, colocación de microchip, cartilla veterinaria europea, intervenciones quirúrgicas simples y complejas, hospitalización y un número reducido de sacrificios. Lo que resuelve una carencia de años. En ese mismo tono el gobierno local emitió dos comunicados para anunciar la modificación de las ordenanzas de Playas -para permitir el uso de la playa de La Mata para la práctica del surf- y el de la ordenanza del taxi por parte del edil Javier Manzanares (PSOE). Cambios que requieren meses de una farragosa tramitación administrativa y un pleno que los valide.
