El PSOE aspira en Orihuela a superar los 8 ediles con los que cuenta en la actualidad en la corporación para poder arrebatar la Alcaldía al centro-derecha. Su candidata dice tener superadas ya las crisis abiertas tras la marcha de dos concejales a los no adscritos y al incluir en la lista electoral a una persona que estuvo afiliada al PP. Carolina Gracia se pone como objetivo modificar el obsoleto PGOU si llega a la Alcaldía.

P ¿Qué expectativas tiene en los próximos comicios municipales donde su partido se juega ser la alternativa al actual gobierno?

R Vamos a por todas y hemos elaborado un programa para gobernar que creemos que es lo que necesita este municipio. En estos años ha habido mucho retroceso en políticas sociales en Orihuela y se ha gobernado a espaldas de la ciudadanía.

P ¿Qué proyectos considera importantes para Orihuela y que no se han hecho?

R Lo que hemos tenido en estos 4 años ha sido un gobierno de egos más que un gobierno con gente con ganas y con motivación. Ha habido problemas internos que han pesado más que lo que es realmente la gestión. Y hay que destacar que había una posibilidad grande de definir el Plan de Ordenación Urbana que hubiese permitido el crecimiento de nuestra ciudad, sobre todo en pedanías, porque no hay ni un metro para construir un centro social, por ejemplo. Es una tragedia que la gente joven que quiere quedarse a vivir en una pedanía de Orihuela se tenga que marchar porque no se puede construir, y se ha perdido una gran oportunidad también de dotar de suelo industrial y que se pusiera fin a la construcción urbanística masiva que sufrió el litoral.

P Ha sido un mandato con algunos conflictos como el que a punto estuvo de costar una huelga de basuras y limpieza...

R Creo que ha habido una intencionalidad de querer dar una imagen de que el servicio no funciona, cuando realmente lo que ha pasado es que el Ayuntamiento no ha invertido ni puesto los medios a pesar de estar municipalizado y ser responsable el Consistorio de que funcione bien. Creemos que hay muchos servicios que se deben externalizar pero otros no porque son viables como ese.

P La marcha de dos ediles de su grupo, Antonio Zapata y Carmen Gutiérrez, a los no adscritos, ¿fue un golpe duro?

R En todos los colectivos hay conflictos y hay que poner en valor la capacidad para solucionarlos como lo que se vivió en enero en el grupo municipal. Hemos podido superar esa división y lamento que las condiciones personales de esas dos personas hayan dejado al PSOE con dos actas menos.

P Se marcharon porque Gutiérrez se sintió agraviada al tomarse la decisión de que solo a ella se le recortaría la asignación para aumentar la que recibiría el nuevo edil Emilio Zaplana, según explicaron. ¿No fue un error provocar esa situación?

R Es una decisión que se adoptó en el seno del grupo porque yo nunca he tomado ninguna unilateralmente. No somos 8 personas independientes, debemos decidir lo mejor para el grupo. Nunca se hizo pensando en atacar a alguien. Y no fue una revancha política por apoyar a otro candidato. Yo consideré que con base en el trabajo realizado, la disponibilidad o cómo afrontar los meses que quedaban para las elecciones, era la decisión que más garantías daba a la estabilidad y al trabajo del grupo municipal.

P Presentó una lista renovada pero donde integró a Alicia Álvarez, que estuvo afiliada al PP...

R No me había comunicado esa circunstancia, si no no hubiera ido nunca en esa lista. Creí que podía aportar porque es hija de un militante del PSOE. Y lamento profundamente lo que pasó. Fue un golpe duro, pero tenemos una candidatura muy preparada para asumir el gobierno de Orihuela.