El Ayuntamiento de Orihuela tiene un plazo de 20 días para arreglar todas las deficiencias, y no son pocas, de las instalaciones utilizadas por el personal de limpieza viaria y recogida de basuras que hay tanto en el polígono industrial como en Orihuela Costa. Los trabajadores se reunieron ayer en asamblea, a la que acudieron el 80% de una plantilla de 140 empleados, y dieron un «sí» unánime a iniciar una huelga indefinida si en ese plazo de tiempo el Ayuntamiento de Orihuela no se reúne con ellos y, por escrito y con firma, anuncia el arreglo de las pésimas instalaciones y la compra de nuevos camiones anunciada hace meses. «Nos hemos cansado de las salvas al aire, queremos hechos», manifestaron ayer los portavoces sindicales de CCOO, UGT y CSI-F.

Los trabajadores llevan meses denunciando las deficiencias que este departamento viene sufriendo desde hace ya varios años, y la precariedad de las instalaciones en las que se ven obligados a trabajar, algo que se ha transmitido en los últimos meses tanto al concejal delegado, Dámaso Aparicio, como al departamento de Recursos Humanos de Rafael Almagro y al propio alcalde, Emilio Bascuñana. Entre las dificultades con las que los trabajadores de limpieza y basura tienen que lidiar son los vehículos en mal estado con continuas averías, el haber más rutas de recogida que vehículos por lo que no pueden descansar, la falta de indumentaria, como mascarillas de seguridad o guantes o que no se disponga de un punto de descarga para las barredoras, teniendo el trabajador que tirar la basura aspirada al suelo del recinto para, posteriormente, echarlo a los contenedores.

Mención aparte es la situación de las campas. En la del Polígono Puente Alto, no se dispone de aseos, al igual que en el local habilitado para el servicio de limpieza viaria (barrenderos), ni hay agua ni luz. En el caso de Orihuela Costa, los trabajadores están confinados en dos barracones los cuales no disponen de luz, y el desagüe que tienen las dos letrinas que se disponen desemboca a escasos tres metros de la entrada a los barracones, por lo que los orines que se depositan en las letrinas salen fuera. La inspección de trabajo exigió al Ayuntamiento el arreglo de todas las instalaciones en mal estado.

Los representantes sindicales piden una reunión urgente con el alcalde «para solucionar y dejar zanjados los problemas, que no pedimos dinero, sino mejoras laborales y de condiciones de trabajo». De no haber respuesta en esos 20 días solicitarán a la Subdelegación del Gobierno la convocatoria de una huelga indefinida que no cesará hasta ver por escrito la solución a sus reclamaciones.