A los vecinos del Rabaloche y el centro de Orihuela les importa contar con un centro de salud nuevo que deje atrás para siempre los barracones que «disfrutan» desde 2008. Y que sea cuanto antes tras dos décadas de precariedad: antes de las prefabricadas -entre 2004 y 2008- el centro de salud, tras el derribo del antiguo edificio por fallos estructurales, se instaló en local alquilado a una antigua colchonería.

Sin embargo, la Conselleria de Sanidad y el Ayuntamiento de Orihuela no logran coordinarse ni para ponerle nombre a las nuevas instalaciones, que ahora sí, se van a poner en marcha de forma inminente -finales de este mes o en año nuevo-.

Las señalizaciones en el acceso principal del centro rezan «Centro de Salud del Rabaloche». Ayer el alcalde Emilio Bascuñana (PP), acompañado del teniente alcalde Rafael Almagro y el portavoz de Cs, Juan Ignacio López-Bas anunciaron que la junta de portavoces ha propuesto que el centro se denomine «doctor Miguel Mellado». Según Bascuñana, aunque algunas formaciones manejaron otras propuestas la anunciada obtuvo el consenso de todos los grupos presentes.

La comparecencia del primer edil también sirvió para dejar claro a la Generalitat que el Ayuntamiento de Orihuela «no ha recibido petición alguna de licencia de apertura. Fuentes del departamento de salud de Orihuela aclararon ayer que el alcalde Bascuñana y el edil Almagro conocen que la petición de esa autorización de licencia de apertura está a expensas de la revisión de la Conselleria de Sanidad a realizar esta misma semana. A continuación, señalaron, «se pedirá la licencia».

La licencia de apertura es obligatoria desde hace unos años también para espacios de titularidad de la administración en los que esté previsto concurrencia de público -aunque el concejal de Actividades y Urbanismo, Almagro, se refirió ayer de forma muy genérica sobre esta obligato- riedad-.

Por otra parte, el acalde Bascuñana-médico de profesión- glosó la figura del doctor Marcelino Mellado Saiz, nacido el 18 de Mayo de 1945 en Salmerón (Guadalajara) y médico en Orihuela desde 1977. «Marcelino era un gran profesional, un gran médico y una gran persona. Sus pacientes le tenían un gran cariño. Les ofrecía un trato personal y cercano, inspirando la máxima confianza en sus certeros consejos y diagnósticos», explicó.

Su vocación surgió al conocer de cerca el oficio, ya que gracias a su padre acompañaba al médico del pueblo en sus visitas a los habitantes de Salmerón.

Estudió la carrera en Madrid y la terminó en 1969 con solo 24 años. Su llegada a Orihuela se produjo en 1977, tras obtener una plaza que se convocaba por concurso. Mellado eligió Orihuela entre otras de la Comunidad.

Desde aquel momento, hasta pocos días antes de su fallecimiento el 24 de noviembre de 2009, se dedicó en plenitud a su trabajo como médico de familia de la Seguridad Social y a sus pacientes en todos los barrios y pedanías de Orihuela.