La empresa familiar goza de buena salud en la provincia. Es el mensaje que se transmitió ayer en la presentación en Orihuela de la exposición «Made in Alicante» donde, a través de más de 500 objetos y documentos, se hace un repaso histórico a las mercantiles familiares en los últimos 160 años en las comarcas alicantinas, presentes en 50 sectores económicos diferentes. La muestra recala en la Vega Baja y se podrá visitar en la sala de exposiciones de la CAM en Orihuela hasta el 31 de enero de 2019. La exposición, organizada por la Asociación de la Empresa Familiar de la provincia de Alicante (AEFA), enseña el «carácter emprendedor y luchador que han tenido las empresas familiares en esta provincia», en palabras de su presidente, Francisco Gómez. Es historia de la provincia a través de las empresas que han sido primordiales en su desarrollo económico.

La muestra comienza su recorrido con la llegada del ferrocarril a Alicante en el año 1858 y, desde ahí, las piezas expuestas cubren las 9 comarcas alicantinas para mostrar las actividades económicas y empresariales que se han llevado a cabo desde entonces. Son más de 350 piezas del patrimonio comercial e industrial tangible apoyado en otras originales como envases, publicidad, facturas y cartas comerciales e iconografía, y otras 300 más reproducidas en los paneles representativos de cada territorio alicantino, que permiten conocer los sectores productivos más importantes de la provincia, entre los que se encuentran el calzado, el mármol o el heladero, para adentrarse en el sector agroalimentario que lidera la Vega Baja, y así lo recuerda un expositor de frutas y verduras, a modo de puesto ambulante, que da la bienvenida.

Uno de los comisarios de la exposición, David Beltrá, señaló que «han sido 5 generaciones de alicantinos pioneros desde que en 1858 cruzaron las vías del tren por primera vez en la provincia». Por su parte, la también comisaria de la exposición, Verónica Quiles, indicó que «con esta edición, dedicada a la Vega Baja, enriquecemos con sabores, olores y colorido la huerta de tradición musulmana, la producción hortofrutícola tiene una gran importancia en la exposición, como la joya de la huerta, la alcachofa».

En el recorrido destaca el espacio dedicado a la Vega Baja y Orihuela con históricas empresas familiares de la zona como el pimentón de la comarca, sus cinco molinos, la gran fábrica de seda con una pequeña cajita de muestras, el proyecto de la Compañía Oriolana de Cementos, el insecticida Oriol así como la representación de una fábrica de sal y chocolate, un elenco de históricas etiquetas hortofrutícolas o una acción de la Caja de Ahorros de Orihuela, fundada en 1880.

El director territorial de Presidencia de la Generalitat, Esteban Vallejo, puso de relieve la preocupación por el relevo generacional «que afecta más a unos sectores que a otros, pero estamos muy a gusto en estos ambientes porque nos gustan los empresarios como vosotros, pero no los negociantes, que no es lo mismo». Por su parte, el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, destacó que «espacios como éste son muy importantes para conocer nuestras raíces y valorar adecuadamente todo nuestro patrimonio».