Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La Policía de Orihuela porta armas defectuosas que se pueden disparar hasta con el seguro puesto

Los agentes exigen la renovación de varias pistolas que tienen más de 25 años por el peligro de que se puedan producir detonaciones fortuitas

Las instalaciones de la galería de tiro llevan precintadas desde junio. tony sevilla

La Policía Local de Orihuela porta armas que pueden comprometer la seguridad de los agentes al tener importantes defectos debido a su antiguedad, más de 25 años. Los policías señalan que esas pistolas se pueden disparar incluso con el seguro puesto -algo que han comprobado- lo que compromete la integridad de los funcionarios ya que, según denuncian, puede producirse un disparo fortuito al manipularlas o puede darse el caso de que un delincuente le arrebate el arma a un policía local en un forcejeo y pueda disparar directamente. Cada arma lleva una pestaña para asegurarla, y que no se pueda disparar sin retirarla y ponerla en lo que se conoce como posición fuego. Sin embargo, algunas de las pistolas que llevan los agentes oriolanos en sus patrullas no cumplen con los requisitos de seguridad que serían convenientes.

Según han explicado a este diario los representantes sindicales de la Policía Local de Orihuela (UGT, SPPLB y CSIF) son actualmente tres los agentes que portan las armas defectuosas con más de un cuarto de siglo de servicio. Señalan que estas pistolas «se disparan solas» y exigen a la concejal de Seguridad Ciudadana, Mariola Rocamora, su retirada, algo que, aseguran, le llevan trasladando desde hace más de un año pero «sigue sin articular palabra ni solucionar este tema». Lo más sorprendente es que el Ayuntamiento adquirió hace varios meses seis pistolas nuevas que se encuentran desde entonces depositadas en intervención de armas de la Guardia Civil, sin que hasta el momento se hayan asignado a los agentes ya que el encargado de realizar dichos trámites, que es el director de la galería de tiro, fue cesado el pasado verano por la edil de Policía tras clausurar dichas instalaciones.

Las armas de los policías locales, una vez que se adquieren, se depositan en la Guardia Civil para su registro. Es el ayuntamiento el que, a través del funcionario encargado de la galería de tiro, quien lleva a la Benemérita un documento firmado con la asignación a cada policía de cada arma adquirida y es entonces cuando la Guardia Civil expide un carné, la guía de armas, que debe portar siempre el agente al que se le ha asignado dicho armamento. En el caso de Orihuela, al no haber responsable de ese área tras haber sido clausurada la galería de tiro, las pistolas adquiridas siguen sin ser asignadas. Un hecho que los sindicatos policiales van a poner en conocimiento, la próxima semana, del coronel jefe de la Guardia Civil de Alicante.

Precintada

Los agentes oriolanos, además, llevan más de un año sin realizar las prácticas obligatorias de tiro. Son dos tiradas cada año, según el convenio, lo que permite no solo mejorar la práctica de tiro de los policías sino también probar las armas que portan y los cartuchos. Lo más grave es que la galería de tiro lleva desde junio precintada y sin visos de que la edil, Mariola Rocamora, la reabra. Rocamora mantuvo una disputa con los sindicatos a cuenta de la modificación de algunos artículos del reglamento que marca las normas de uso de la galería de tiro, y optó por clausurar las instalaciones hasta que hubiera un acuerdo por escrito.

La edil explicó a INFORMACIÓN que «la galería de tiro está cerrada por un escrito que presentó el director e instructores que, según manifiestan, el reglamento actual no los cubre o ampara en seguridad como ellos hacen las tiradas y pidieron su modificación parcial, lo que está siendo estudiado por ambas partes y está siendo tratado en el Consejo de Policía».

Los policías locales piden a Mariola Rocamora que desprecinte la galería de tiro. Según trasladaron los representantes sindicales a este diario el desencuentro principal surgió por la negativa de Rocamora a contratar un seguro de responsabilidad para que los policías estuvieran cubiertos ante posibles accidentes dentro de esas instalaciones. La concejal, por el contrario, quiso incluir el que cada agente que hiciera las prácticas firmara un documento de exención de responsabilidad del Ayuntamiento ante accidentes, según estas mismas fuentes. Algo a lo que se niegan los sindicatos.

También propusieron a la edil el cobro de un canon a los ayuntamientos interesados en que sus policías realicen allí sus prácticas de tiro. Otra de las peticiones fue sustituir las cabinas desde las que se dispara, por ejercicios en la pista que permitan una mayor destreza a los agentes ante situaciones reales, para disparar cambiando de posición, de rodillas o arrastrándose.

En el último Consejo de Policía los sindicatos se comprometieron con la edil a hacer modificaciones en el texto y acordaron volver a reunirse. Han pasado varios meses sin recibir la llamada del Ayuntamiento. Los tres sindicatos presentarán mañana un escrito por registro pidiendo al alcalde, Emilio Bascuñana, el cese de competencias de Mariola Rocamora «por la situación de inacción y mentiras», señalan.

Sin cartuchos desde hace más de dos años

El Ayuntamiento de Orihuela lleva dos años sin adquirir nueva munición para los ejercicios de tiro de los policías locales. A pesar de que la cartuchería debe renovarse cada año, por seguridad, ni en 2017 ni este año el Consistorio ha comprado la munición necesaria (4.000 cartuchos), según denuncian los sindicatos UGT, SPPLB y CSIF. Los agentes recuerdan que es fundamental para las prácticas de tiro y para comprobar el estado en el que se encuentran las armas. En los últimos ejercicios de tiro que realizaron, en 2017, tuvieron que usar cartuchos sobrantes de años anteriores.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats