El contrato para el servicio de escarda y retirada de infrutescencias en las palmeras de propiedad municipal del Palmeral de San Antón de Orihuela está bajo sospecha. Al menos es lo que considera Cambiemos, que ayer denunció una serie de presuntas irregularidades en este contrato adjudicado el 20 de marzo de este año a la empresa «Natura Constructiva SL». El portavoz de la formación, Carlos Bernabé, señaló que el contrato, con una duración de 2 años con opción a prórroga de otro, estaría «plagado de cosas extrañas».
Esas «cosas extrañas» se traducen en que en la licitación, a la que se presentaron seis empresas, se emitió un informe sobre una de ellas por parte de una técnico alertando de una posible «baja temeraria», figura que se utiliza para señalar ofertas que son excesivamente bajas y, por ende, peligrosas para el cumplimiento del contrato. Esa mercantil señalada fue la que unos meses después se llevaría el contrato. Todo tras el relevo de esta funcionaria sólo cinco días después de que emitiera ese informe.
Según denunció Bernabé, el concejal de Medio Ambiente, Miguel Ángel Fernández, solicitó cambiar a la técnico responsable del área para ubicar al técnico de Fomento, lo que autorizó el edil de Recursos Humanos, Rafael Almagro, el 18 de octubre de 2017, fecha en que le fueron revocadas las competencias que tenía como técnica en Medio Ambiente. «Tras ese extraño juego de sustituciones todo se vuelve más descarado», señaló Bernabé.
El nuevo técnico designado por Fernández emitió un nuevo informe sobre la baja temeraria señalando que «Natura Constructiva se ha comprometido explícitamente a cometer todos y cada uno de los requisitos (...) hasta en tanto no se pueda poner en práctica cada uno de los compromisos adquiridos no es posible discernir de forma previa la posibilidad de su incumplimiento». Por ello estima que la mercantil de referencia debía ser la adjudicataria del contrato, entendiendo que, si llegado el caso se comprobase que efectivamente pudiera derivarse algún tipo de incumplimiento de las tareas y funciones, en ese instante «debería ser objeto del correspondiente expediente de denuncia».
Beneficio industrial
El edil señaló que «no entro a cuestionar el derecho de un técnico a emitir un informe en una dirección u otra, ni el del concejal a designarlo», pero, a su modo de ver, «algo huele rematadamente mal ya que ganó la peor oferta económica y ambiental», a su juicio. Además, Bernabé desveló que la empresa ofrecía un descuento de hasta el 46% sobre el precio por palmera y reducir el beneficio industrial, que es del 18%. «Esa oferta tan descaradamente baja puede obedecer a una explotación laboral o futuro incumplimiento sistemático del contrato». Y aseguró que la mercantil ganadora ofrecía la menor cantidad en intervención contra el picudo.
Cambiemos pidió explicaciones al edil de Medio Ambiente y exigió que la puesta en marcha de una auditoría pública del contrato para que pueda desvelarse si existieron irregularidades tanto en su tramitación como en su adjudicación. Por su parte, el edil del área, Miguel Ángel Fernández, no quiso entrar en esta polémica tras la llamada del este diario, pero desmintió las presuntas irregularidades y señaló que en unos días demostrará «las falsedades de Cambiemos» con datos.
