La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) en Alicante lamentó ayer que los mandos no hayan puesto «en marcha medidas sanitarias preventivas» para los agentes que hubieran podido estar expuestos a contagios de patologías infecciosas, como la tuberculosis, en el marco del operativo desplegada para recibir a los más de 140 inmigrantes, llegados a las costas de la provincia en las dos últimas semanas.
La AUGC lamenta «denunciar nuevamente, como en otras ocasiones públicamente la falta de sensibilidad,por parte de quienes están al mando de los agentes en la Comandancia de Alicante, que al parecer hacen oídos sordos a las necesidades y peticiones de los propios agentes, más aún cuando se trata de un tema tan preocupante como la prevención de la salud de los agentes», indica la misma fuente en una nota de prensa.
El colectivo explica que el pasado día 30 de septiembre agentes del acuartelamiento de Pilar de la Horadada y de Torrevieja estuvieron «en contacto directo» con inmigrantes de origen magrebí y subsahariano, que llegaron a la costa de la Vega Baja en varias embarcaciones. Uno de ellos fue trasladado al Hospital Universitario de Torrevieja para realizarle un reconocimiento y pruebas médicas «ya que al parecer pudiera ser portador de algún tipo de enfermedad infecto-contagiosa, posiblemente tuberculosis».
«Fuga» del hospital
En el personal sanitario indicó que el resultado de las pruebas podría demorarse unas 48 o 72 horas, por lo que el inmigrante fue puesto en libertad en la mañana en el centro hospitalario, comunicándole la obligación de comparecer en la Oficina de Documentación y Extranjería de Elche, «quedando a la espera de los resultados de las pruebas diagnósticas». Esta medida, siempre según el colectivo de la AUGC, «fue tomada por un mando de la Guardia Civil a pesar de que el inmigrante pudiera contagiar alguna enfermedad transmisible tanto a los agentes, a sus familiares así como al resto de la ciudadanía». Sin embargo, este diario ha podido confirmar por fuentes sanitarias que el paciente, que ya había dado negativo en las primeras pruebas, se «fugó» del centro antes de culminar los análisis. Es decir, no hubo una orden de puesta en libertad. Horas más tarde, el mismo inmigrante fue interceptado por la Guardia Civil de Torrevieja «aportando esta vez otros datos de identificación personales, permaneciendo en custodia hasta el día siguiente y siendo trasladado posteriormente en la tarde del 2 de octubre por agentes de esa Unidad al Cuerpo de la Policía Nacional».
Tras este episodio, en la Asociación se recibieron «diversas consultas de nuestros afiliados en estado de preocupación ya que a día de hoy se desconocen si los resultados analíticos realizados a dicha persona han dado resultado positivo». En este sentido, la AUGC realizó una comunicación de riesgos a la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante solicitando que se activase el protocolo de prevención de la salud a todos los agentes que estuvieron en contacto con el inmigrante posible portador de la enfermedad infecto-contagiosa, y le fueran realizadas pruebas.
