La plantilla de la Policía Local de Callosa de Segura se muestra sorprendida a la par que indignada por unas declaraciones realizadas por el alcalde de la localidad, Fran Maciá (PSOE), a una televisión comarcal con ocasión de la presentación de la Unidad de Mediación de este cuerpo policial. Maciá respondía a las preguntas de Televisión Vega Baja cuando en un momento determinado de la entrevista señaló que «la Policía Local tenía que dar un salto de lo que es un simple servicio represivo, un simple servicio de detenciones, a lo que es dar el servicio ciudadano».

Estas manifestaciones han sentado muy mal a los policías callosinos que exigen una rectificación al regidor. Fuentes policiales han señalado a este diario que «resulta desconcertante que el alcalde se atreva a calificar de represiva a su propia Policía, de la cual es su jefe nato» y recordaron que «Fran Maciá pidió a la Subdelegación del Gobierno la presencia de la Unidad de Antidisturbios de la Guardia Civil y sobre unos 70 efectivos cercaron las inmediaciones del monumento de la Cruz de los Caídos que se iba a retirar, y si bien no ponemos en cuestión la legalidad de la actuación, sí su contundencia, la cual sí que podría tildarse de 'represiva'». Y dicen que sus actuaciones son «ayudas humanitarias, atestados de tráfico, molestias vecinales o regulación del tráfico, siendo las detenciones un servicio residual, el que menos se realiza y ya prestamos un servicio al ciudadano lo mejor posible, dados los medios de los que disponemos».

Estas fuentes indicaron que el malestar con el gobierno local es «cada día mayor» y se plasmó en el «plantón» de parte de la plantilla policial en la celebración de los «Ángeles Custodios», y piden a la nueva edil de Seguridad, Ana Belén Berná, «una actitud más mediadora».