El Ayuntamiento de Orihuela no esconde su preocupación por el estado de las cubiertas de las acequias que discurren por el subsuelo de la localidad y que hacen las veces de aceras. La Concejalía de Infraestructuras se ha dirigido al Juzgado Privativo de Aguas para solicitarle un listado de todos los tramos de acequias que están cubiertos para saber cuáles han sido tapados por la administración local que son sobre los que tiene responsabilidad el Ayuntamiento, según señaló ayer a este diario el edil del área, Juan Ignacio López-Bas. No obstante, desde el Juzgado de Aguas señalaron ayer al periódico que todas las cubriciones de sus acequias las ha realizado el Consistorio. Son ya tres las losas que cubren los canales de riego que se han derrumbado en dos años, la última el pasado miércoles por la tarde en el Barrio de Mariano Cases de Orihuela.

Afortunadamente en ese momento no pasaba por encima de la cubrición. Un vecino de la zona, que sobre las 19 horas sacaba la basura, fue testigo de la caída del cimbrado. «Oí un fuerte estruendo», señaló a INFORMACIÓN, y añadió que «hace un tiempo que se hundió el pavimento al aparcar allí un camión para recoger limones de un huerto cercano y entonces el Ayuntamiento y la Policía Local pusieron una valla y una cinta para impedir el paso, y nada más», se quejó. Parte del muro de una vivienda pegada a la acequia, que no cumple con los dos metros de separación a cada lado del canal, también se desprendió.

Fue el Ayuntamiento de Orihuela quien cubrió la acequia en el año 1997 como informó ayer el Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela, dueño de las acequias que discurren bajo la localidad. Esta entidad ha ido dando permisos desde los años 80 al Ayuntamiento para cubrir los canales de riego que han quedado cerca de edificaciones por el desarrollo urbanístico del municipio. Por debajo de la propia ciudad discurren una serie de acequias desde tiempo inmemorial que están, obviamente, cubiertas y hay incluso alguna compuerta en pleno centro que ha quedado disimulada en una rotonda. Sin embargo, el Consistorio a estas alturas desconoce cuántas acequias discurren bajo su suelo y donde se sitúan esos tramos, por lo que el Juzgado de Aguas prepara un plano con todas ellas.

Conservación deficiente

La mayoría de las cubiertas de las acequias tienen entre 20 y 30 años y su conservación, en algunos casos, es muy deficiente. El Consistorio tiene previsto revisarlas una a una, una vez tenga localizados los tramos, aunque López-Bas explicó ayer que «lo que va a ser complicado es ver cómo están de deterioradas las losas por dentro, si están oxidadas las viguetas que las sujetan que eso no se ve a simple vista y es lo que está provocando sus derrumbes». Son estructuras de hormigón sujetas por vigas de hierro.

No fue hasta 2013 cuando el Ayuntamiento firmó un convenio con el Juzgado de Aguas mediante el cual el Consistorio le paga anualmente 7.750 euros como indemnización del sobrecoste del mantenimiento de las acequias que no están abiertas. «Pero en ese convenio solo aparecen especificadas 6 o 7 acequias, y en las autorizaciones que da el Juzgado de Aguas para poder taparlas no pone ninguna condición de su mantenimiento», dijo López-Bas. Intervención ha puesto reparos en los últimos años al pago de reparaciones en las cubiertas de los canales de riego por ser privados y considerar que de su mantenimiento se debe ocupar el propietario. Una cuestión que se sigue dirimiendo en la actualidad, aunque el Consistorio está ya asumiendo como suyo el mantenimiento de las cubriciones de las acequias. «Lo hacemos por la lógica de que es una zona de tránsito, de personas y hasta de vehículos, pero solo por eso. No hay nada que nos obligue realmente», apuntó el edil.

No obstante, el Ayuntamiento tiene previsto reservar una partida fija anual de entre 200.000 y 250.000 euros para reparar roturas de las losas de hormigón que cubren los canales de riego tradicional. El Consistorio pondrá un nuevo cimbrado en la acequia derrumbada en el Barrio de Mariano Cases, según anunció ayer el edil de Infraestructuras.

¿Responsabilidad?

Lo que aún no tienen claro ni Ayuntamiento ni Juzgado de Aguas es quién sería responsable en el caso de que una persona cayera al derrumbarse una cubierta. López-Bas asegura que «no me atrevería a decir de quién es la responsabilidad, aunque asumo que el Ayuntamiento puede tener parte de culpa al ser una zona de paso público, pero después habría que reclamar y estudiar la verdadera responsabilidad». El Juzgado de Aguas, según anunció a este diario, cuenta con un seguro «por posibles accidentes en una de nuestras acequias, como ahogamientos», pero no aclaró si cubriría ese tipo de accidentes.

Hace 2 años se hundió la acera y el carril bici que cubrían una acequia en Desamparados tras el paso de un tractor que cayó al canal. Finalmente el Ayuntamiento se hizo cargo de su arreglo por medio de una subvención de la Generalitat que fue quien cubrió la acequia. Y en Molins, se vino abajo otra cubierta muy transitada el pasado julio.