La Vega Baja se volvió a volcar ayer con las celebraciones en honor a la Virgen del Pilar. Aunque no es patrona en muchas de las localidades, se venera en numerosos municipios por la devoción que hay en esta comarca a la Pilarica. El buen tiempo que acompañó en la jornada de ayer, con sol y calor, permitió que miles de personas aprovecharan el día festivo para disfrutar de una jornada de campo en los parajes donde se encuentran los santuarios de la Virgen, como en Benejúzar y en Callosa de Segura.

Benejúzar es, precisamente, el municipio donde mayor número de personas se congregan en torno a esta celebración. Ayer, más de 50.000 participaron en la Romería de la Virgen del Pilar, en un municipio que es conocido como la «Zaragoza chica» por lo multitudinario de su romería que atrae no solo a benejucenses y vecinos de la Vega Baja, también de otras muchas localidades de la provincia y de regiones vecinas. Una misa dio inicio a los actos. A la salida de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, la Virgen fue recibida con vivas, aleluyas y aplausos, además de papelillos y la suelta de globos que contenían peticiones que han hecho los vecinos a la Virgen y de palomas.

Pasadas las 9 de la mañana, la Pilarica inició la romería seguida por miles de fieles, que desde primera hora abarrotaban la Plaza de España. El trono fue precedido por cinco carrozas, tres de ellas artesanales y decoradas a mano, una de mariposas y flores, otra de un salón con una plancha y con una mesa y una silla gigantes y una tercera de unas mañas sentadas dentro de una enorme cesta, que participaron en el concurso de carrozas. Las otras dos estaban reservadas a los niños y niñas y a la corte de mañas con sus trajes típicos en el día grande de su Virgen del Pilar, como Mañica Mayor, Laura Cartagena, y Sara Gálvez, como Maña Mayor, así como las Mañas de Honor, Alba Romero, Marina Ferrer y Katia del Pilar Ferrer, y las Mañicas de Honor, Cristina Ramírez, Valentina Aravid, Amanda Martínez, Inés Arce, Carmen Tafalla, Iris Pertusa y Vega Yáñez.

El Grupo Folclórico Nuestra Señora del Pilar de Benejúzar fue el encargado de poner el folclore tradicional a este multitudinario acto, con las castañuelas y las jotas que acompañaron a la talla mañica desde el templo parroquial hasta su Santuario, en lo alto del monte de Benejúzar, donde a su llegada se celebró una misa baturra, presidida por el Obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui.

Romeros

La Romería de la Pilarica de Benejúzar es la celebración más multitudinaria de la comarca. Los romeros, ataviados con el tradicional pañuelo mañico, aprovecharon para pasar el día en el Paraje de la Pilarica donde, desde bien temprano, levantaron sus carpas para coger sitio o, simplemente, portaron neveras portátiles cargadas de comida y bebida. Otros muchos llevaban acampados desde el miércoles en el paraje como es tradicional, donde hay instalada una feria y numerosos puestos de venta. La fiesta cuenta con el distintivo de Interés Turístico Provincial y con 79 años de antigüedad, y está pendiente de recibir el merecido distintivo autonómico.

Los romeros de Benejúzar muestran su devoción por la imagen que se venera en el principal templo de la localidad al que llegó en 1939 de la mano de cinco jóvenes que mientras se encontraban presos en el reformatorio de Alicante durante la Guerra Civil, se encomendaron a la Virgen para poder salir vivos de aquel trance. Después de ser liberados y en cumplimiento de la promesa realizada a la Virgen, encargaron una talla de su imagen al escultor valenciano Enrique Bellido a la que desde entonces se rinde culto en el templo parroquial de la localidad. Una figura con historia que cada año es arropada por más gente. A las 20 horas comenzaron los actos de despedida de esta fiesta con la salida de la imagen del Santuario entre jotas y plegarias.

Multitudinaria también fue la romería en Callosa de Segura. Aunque no es patrona del municipio, la Pilarica cuenta con muchos devotos en esta localidad y un gran arraigo popular. Cientos de personas acompañaron ayer a la pequeña imagen de la Virgen que fue trasladada desde la Iglesia Arciprestal de San Martín hasta su santuario. La subida fue animada con cánticos y los bailes de jotas, hasta la ermita enclavada en el corazón de la Sierra de Callosa, en el paraje de «La Pilarica». Allí esperaban multitud de romeros que disfrutaron de un almuerzo y una comida en el campo.

La jornada se convierte en un día de convivencia en un entorno privilegiado a la sombra de las montañas. Esta romería se inició en el año 1947. La Virgen del Pilar permaneció todo el día en la ermita hasta que a las 18 horas se inició la bajada y fue devuelta a su camarín del templo.

En Pilar de la Horadada el día de su patrona se inició temprano. A las 8 de la mañana el volteo de campanas anunció que la localidad estaba en el día grande de sus fiestas patronales. El tradicional pasacalles, a cargo de la U.M. San Isidro, animó a los vecinos. A mediodía se celebró la misa en honor a la Santísima Virgen del Pilar en la Iglesia Parroquial. Ya por la tarde discurrió la procesión con el trono de la Virgen por las principales calles del municipio, que finalizó con un castillo de fuegos artificiales.

Para hoy hay previstos en el municipio talleres y actividades infantiles de 10 a 14 horas en la carpa del recinto ferial y «paintball». Además, a las 19.30 horas habrá un espectáculo infantil, llamado «XV Aniversario La Pandilla de Drilo» y, ya por la noche, verbena popular en la Plaza Santo Domingo.

La charanga despertó a los vecinos de Los Montesinos que celebró ayer los actos troncales en honor a su patrona con una misa cantada y la procesión en honor a la Virgen del Pilar que acabó con una alborada.