El estado de los centros de trabajo de la plantilla del servicio municipal de recogida de basura del Ayuntamiento de Orihuela es surrealista (y lamentable). Estas instalaciones en Orihuela Costa -que es desde donde se inicia el turno de trabajo para los 15 kilómetros del litoral- están ubicadas sobre suelo «ocupado» a un aparcamiento público de la urbanización del Sector PAU 26, junto a la calle Miño y el puente de la autopista, frente al residencial Entre Almendros. No es un solar municipal. Camiones de recogida, material y otras dependencias se distribuyen sobre una explanada de1.500 metros tan solo separada por una valla provisional de la calle. Los vestuarios son dos barracones sin suministro eléctrico con unos aseos impracticables.

Una Inspección de Trabajo alertó en marzo que contar con luz por un enganche de una farola no era ni recomendable desde el punto de vista de la seguridad, ni legal. Una situación urbanística que no superaría un particular sin expediente de disciplina y multa. Es improbable que el recinto, que se usa desde 2008, cuente con licencia de actividad.

En Orihuela Ciudad, durante meses, el personal del turno diurno de aseo urbano -limpieza de calles- ha cuestionado el estado de nave que compartían con operarios de Festividades y el hecho de que la partida para reformarlo hubiera desaparecido de los presupuestos. A finales del mes de septiembre,un banco, propietario del solar, confirmó que tenía previsto ejecutar el desahucio de la finca. A toda prisa el Ayuntamiento improvisó una nueva ubicación: los operarios están ahora compartiendo espacio con el archivo municipal, muy cerca del Ayuntamiento, frente a la iglesia de Santas Justa y Rufina. Se alternan escobas y barredoras con el archivo oriolano, incluida, según ha podido saber este diario, documentación administrativa devuelta por el juzgado de Orihuela de los registros policiales del Caso Brugal en el verano de 2007.

Alquileres

El concejal de Patrimonio y Urbanismo, Rafael Almagro (PP) explicó ayer que esta situación se deriva, a su juicio, del rescate de la contrata de basura en 2012 por parte del anterior gobierno municipal de izquierdas. Según el edil se decidió la municipalización sin ningún tipo de previsión. Sin infraestructuras municipales con las que sostener el servicio, dijo.

La misma fuente señaló que la solución pasa por realizar contratos de alquiler dado, que el municipio carece de patrimonio en propiedad para ponerlos en marcha. Algo, señaló, que en una administración pública requiere tiempo, a la hora de realizar el expediente de adjudicación de los arrendamientos. Sobre la situación de la nave de la que ha sido expulsado el Ayuntamiento, Almagro dijo que el municipio creía hasta hace poco que era propiedad de San José Obrero. Pero por sorpresa se confirmó que la propiedad pertenecía a un banco. Almagro recordó que la situación en ambos casos se arrastra desde hace años y mostró su extrañeza de que sea ahora cuando los sindicatos la cuestionen.