? «Vivimos al lado. Hemos oído un ruido muy fuerte, el edificio cayendo y gente dentro. Todos, mis tres hijas, mi marido y yo hemos salido corriendo al momento, igual que otros vecinos, y hemos avisado al administrador», explicaba ayer, todavía algo asustada, Ibtissam, mientras recogía cosas imprescindibles de la casa, a la que se accedía tras un precinto policial. «Cuando estaban intentando sacar al vecino de la planta baja el edificio ha empezado a ceder y entonces es cuando han desalojado todo». «Nos ha contado uno de los propietarios que el suelo se abrió y luego se hundió arrastrando todo lo demás. No sabemos qué ha pasado, si la obra está mal hecha. Mi hija pequeña se ha ido llorando al cole», explicaba IbtissaM.