Padres de alumnos del IES Torrevigía de Torrevieja han reclamado la convocatoria de una reunión extraordinaria del Consejo Escolar para modificar la normativa interna que prohíbe vestir pantalón corto, tipo «short», a las estudiantes. La iniciativa, que necesita para salir adelante la mayoría de votos de padres, profesores y alumnos en ese órgano de representación, se ha producido después de la polémica por la actuación de la dirección del centro que impidió el paso a las dos primeras horas de clase el viernes y ayer a las alumnas que desafiaron la prohibición vistiendo pantalón corto. Un numeroso grupo de alumnas decidió a primera hora, poco antes de abrirse las puertas del IES, insistir, como acto de protesta, en acudir con este atuendo.

Permanecieron durante unos minutos antes de acceder al recinto, algo que también secundaron algunos estudiantes. También se presentó un reducido número de madres. Poco después de entrar a sus clases, las alumnas fueron conducidas a las oficinas de dirección, donde, según los padres, les leyeron la normativa interna. Perdieron una hora lectiva. El director del Instituto, Carlos Irles, explicó que la prohibición está recogida en el reglamento de régimen interno del centro y avalada por el Consejo Escolar desde principios de este curso. Reglas que también son asumida por los padres una vez que firman la documentación de la matrícula y aparecen, junto a otras, en la agenda que se distribuye a los alumnos todos los cursos. Irles explicó que las «normas están para cumplirlas», también las de «decoro» en un centro de enseñanza.

Las que haga falta

Por su parte, la Conselleria de Educación señaló ayer que «cada centro cuenta con autonomía en su régimen interno respecto a estos temas, a partir de instrucciones genéricas de inicio de curso». Las mismas fuentes añadieron que en este caso se está trabajando «desde la dirección del centro y la orientadora con familias y alumnado ya el viernes, y con todas las reuniones que hagan falta para mediar. La inspección educativa está también en la coordinación del tema y asegurando garantizar el derecho a la educación del alumnado y en la mediación del posible conflicto». La madre de una de las jóvenes de 12 años, María Ángeles Bellvís, miembro de la Asociación de Padres, criticó como «injusta» la actitud de la dirección porque queda a criterio de los profesores si se incumple «según consideran más o menos largos los pantalones».

Los padres han cuestionado sobre todo la forma de aplicar la disciplina: sacando a las alumnas de clase y agrupándolas en la biblioteca o en oficinas de dirección y luego haciendo que perdieran horas lectivas. También aseguran que estas alumnas, que han decidido ignorar la normativa, han sido «amenazadas» con no acudir a la graduación o al viaje de fin de curso.