Jesús Gimeno, responsable de Acción Institucional de Ciudadanos en la Comunidad ha decidido darle oxígeno a la propuesta de moción de censura del PP en un momento crucial de Cs Torrevieja: un todos contra todos por hacerse con la candidatura a la Alcaldía y la elaboración de la lista electoral. Y eso que en Cs Torrevieja, con unos 100 militantes y sin capacidad para convocar primarias, es algo que resolverá «desde arriba Barcelona». La iniciativa de negociar la moción ha tomado, en apariencia, por sorpresa a los bandos enfrentados, que pueden ser dos, tres o cuatro, según el día.
Está el grupo más numeroso, en la órbita de la coordinadora local, dirigida por José Luis Almira -al que no se le conoce comparecencia pública desde su elección-; y que cuenta con apoyos como la edil Paqui Parra y de militantes del que ya se da como extinto grupo independente de APTCe -con Manuel Ballester como miembro más destacado, -y por supuesto el edil Domingo Soler-.
Por otra, el bloque encabezado por la portavoz municipal Pilar Gómez Magán -lleva todo el mandato enfrentada con la agrupación y su grupo municipal-, que ha logrado con esta negociación una visibilidad inesperada. Suma apoyos de desencantados del PP que tienen intención de posicionarse en la lista de salida de Cs.
En la terna de quienes tienen influencia en la formación también se encuentra el empresario Carlos Carmona, en un principio «no adscrito» a «bando» alguno. Mientras unos y otros han «hablado» con Tomás Martínez, hijo de quien fuera fundador de AP.
No se entiende mucho
Entre las filas populares también existe cierta confusión ante la estrategia de su portavoz Eduardo Dolón -más allá de precipitar un desenlace de los problemas de Cs-. Con esta moción se especula desde el inicio de mandato. No está claro si tiene sentido ahora asumir la Alcaldía con numerosos frentes abiertos difíciles de resolver y que el electorado, con memoria a corto plazo, podría achacar al PP.