La tormenta de verano registrada ayer en Guardamar del Segura dejó 21,8 litros por metro cuadrado en apenas media hora, según se cuantificó en el observatorio de Hidraqua. La tromba de agua causó desperfectos en zonas de baño como Playa Centro, llevándose por delante las pasarelas de madera, lavapiés y papeleras. A pocos kilómetros, en Torrevieja, apenas llovió, pero una manga marina hizo volar por los aires las sombrillas y sillas de los bañistas.

La precipitación, acompañada de actividad eléctrica, sorprendió a vecinos y turistas porque la previsión no marcaba lluvias. El volumen de agua caído en Guardamar fue muy considerable teniendo en cuenta que en lo que va de año se han registrado en el municipio un total de 168 litros. En diferentes zonas de la localidad las alcantarillas no daban abasto y operarios municipales se emplearon a fondo para afrontar la situación, según informó el alcalde, José Luis Sáez.

Al sur, lindando con el término municipal de Torrevieja, en La Mata, apenas cayeron unas gotas. Sin embargo, lo que sorprendió fue una espectacular manga marina que partiendo de la orilla de la playa arrastró sillas y sombrillas de los bañistas, como recogieron las cuentas en redes sociales de MeteOrihuela y Proyecto Mastral.