Callosa de Segura ha vivido un intenso fin de semana en el inicio de sus fiestas patronales en honor a San Roque y de Moros y Cristianos. Cientos de personas se echaron ayer a la calle, y hasta bien entrada la noche, para participar en uno de los actos más desenfadados de los Moros y Cristianos, la retreta festera, con la que las seis comparsas hicieron vibrar la Plaza de España bailando y coreando canciones hasta que el cuerpo aguanta. Un año más la borrachera de alegría de la retreta general contagió a los callosinos y callosinas que alargaron la fiesta hasta el amanecer.
Como manda la tradición, los distintos grupos festeros salieron de sus kábilas pasadas las 20 horas acompañados de las bandas de música para acudir a las casas en las que viven las abanderadas de sus comparsas. En esta ocasión no van vestidas con trajes de gala sino con ropa más desenfadada y fresca porque por delante tienen varias horas de juerga en la que deben dirigir a sus compañeros guiándolos con la bandera.
Por supuesto, tampoco faltaron los disfraces, complementos de todo tipo. Los comparsistas y festeros se mojaron... y mucho, porque es una tradición que al pasar el desfile por determinadas calles los vecinos lancen cubos de agua.
Pasadas las 22 horas las comparsas festeras se dieron cita en la intersección de la Rambla con la calle Convento, para enfilar después el camino que va hasta la Plaza de España, donde se ubica el Ayuntamiento.
Allí el alcalde de la localidad, Fran Maciá, hizo el saluda a los comparsistas desde el balcón de la casa consistorial acompañado de representantes de los distintos grupos y les animó a continuar con la fiesta, que siguió con una revista de variedades en el Jardín Glorieta y ya, hasta bien entrada la madrugada, en las kábilas y barracas festeras. Aún quedan muchos días de diversión por delante. Para hoy está prevista la Entrada Mora, desde el Paseo de la Estación, a las 21 horas.
