Tres acusados han sido condenados a sendas penas de cuatro años de prisión por abusar sexualmente en grupo de una chica en un coche estacionado en el aparcamiento de una discoteca de Torrevieja. La sentencia les declara autores de un delito de abuso sexual continuado con acceso carnal, pero les aplica la atenuante de dilaciones indebidas por los retrasos y paralizaciones sufridos por el proceso durante su tramitación.

Los hechos ocurrieron durante la madrugada del 24 de agosto de 2008, cuando los procesados, que están desde entonces en libertad provisional, conocieron a la víctima en la discoteca Barlovento y la convencieron para que les acompañara al exterior.

El fallo -que será recurrido en casación por la defensa ante el Tribunal Supremo, según fuentes jurídicas- detalla que los implicados la introdujeron en el asiento trasero de un vehículo, donde la desnudaron y se sucedieron por turnos para penetrarla vaginalmente hasta eyacular en su interior sin utilizar preservativo.

La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, que tiene su sede en Elche, sostiene que la chica estaba afectada por la ingesta de alcohol y alguna sustancia que no ha podido ser determinada durante la investigación, lo que «anulaba su voluntad y le impedía comprender lo que sucedía».

De acuerdo con el relato judicial, mientras uno de los acusados abusaba de ella en el coche, sus amigos invitaban a otros jóvenes que estaban por el aparcamiento a sumarse a su acción con expresiones como «miradla, si se está quedando dormida con la polla en la boca».

Algunos de esos jóvenes vieron que no era consciente de lo que ocurría y la sacaron del coche. Uno de estos testigos llegó a intentar agredir a uno de los delincuentes tras comprobar que la joven estaba como «dormida» mientras sufría los abusos, y así lo declaró él mismo en el juicio.

Al día siguiente, la perjudicada no recordaba nada, pero una prima suya que había presenciado la escena le contó lo sucedido y la acompañó a un centro de salud y a interponer una denuncia.

Actualmente la víctima aún «tiene miedo de salir sola a la calle», según la resolución, que establece una indemnización total para ella de 30.000 euros.

Tanto la Fiscalía como la acusación particular, que ejerce la propia afectada, atribuían a cada acusado tres delitos de abuso sexual. Las acusaciones solicitaron para los ahora condenados penas de hasta once años de prisión en el transcurso de la vista oral que concluyó a finales del mes de abril.

Sin embargo, la Audiencia les culpa de un único delito continuado tras citar jurisprudencia del Tribunal Supremo relativa a abusos sexuales cometidos en grupo, donde los implicados «contribuyen a la configuración de la situación en la que se producen los hechos e intercambian los papeles en las prácticas sexuales».

Tras apreciar la atenuante de dilaciones indebidas, los magistrados fijan las condenas en cuatro años de cárcel, seis meses más del mínimo legal en estas circunstancias y tres años menos de los siete de máximo al que podían llegar.