La Embajada Cristiana de Orihuela celebró ayer el triunfo de la Reconquista como sólo Tadmir sabría hacer: con un auténtico espectáculo de inspiración medieval, con la nobleza comiendo, bebiendo y riendo y con su embajador, Isidro Hernández, saludando exultante al pueblo desde su carroza. La ciudad se vistió anoche de historia y leyenda para festejar la victoria de la cruz sobre la media luna y elevó al cielo a su heroína, la Armengola,encarnada en Mercedes Andreu, que desfiló triunfante y agasajada por un elegante boato.

La comparsa Caballeros de Tadmir, la más numerosa de Orihuela, brilló ayer con luz propia durante la que fue su sexta Embajada de la historia. Lo hizo con un desfile pensado para sorprender, con cerca de un millar de integrantes y un espectáculo que retrotrajo a Orihuela a una época en la que jorobados, malabaristas y bufones divertían al público a cambio de un puñado de monedas mientras la Inquisición condenaba a las brujas a la hoguera. También hubo héroes y ayer participaron en el espectáculo sobre una plataforma que reproducía las ruinas del Castillo de Orihuela, hecha para la ocasión. Sobre ella se exhibió la familia Almagro Moreno, cuyo padre preside la comparsa desde hace dos años. Sus hijos, Octavio y África, eran el capitán y abanderada infantil, y el matrimonio, Octavio y María Nieves, los cargos adultos. De fondo sonaba la banda Auxilium del Oratorio Festivo de Orihuela.

Música y guiños al patrimonio cultural oriolano fueron dos de las notas predominantes durante la puesta en escena de los embajadores. En el desfile se integraron hasta seis bandas musicales y un grupo de frailes que fue fácil de reconocer. Eran los Cantores de la Pasión, que interpretaron la ópera «Carmina Burana» de forma exquisita tras meses de ensayos. Y muy cerca de ellos, otro elemento del todo representativo de la ciudad diocesana: una reproducción de la Cruz de la Muela seguida de una fanfarria de inspiración medieval.

Ejército de gala

No faltaron, por supuesto, las huestes de Tadmir y sus elegantes corceles formando parte del espectáculo junto a esos guerreros y guerreras vestidos de gala y dirigidos por los cabos que pelearon por la victoria. El ejército medieval de la comparsa estuvo representado por 12 ?las, todas ellas especiales, pero una especialmente llamativa. Compuesta exclusivamente por mujeres de Orihuela que han ocupado el cargo de Armengola, todas ellas quisieron acompañar a Isidro Hernández en su Embajada, quien estuvo arropado durante el desfile por su hija Pilar Hernández y su mujer, Nuria Castillo.

Al deslumbrante espectáculo de los Caballeros de Tadmir, siguió después el protagonizado por el resto de tropas del bando cristiano, con Caballeros del Oriol; Piratas Bucaneros; Caballeros de Santiago; Seguidores de Arún y Ruidoms; Contrabandistas; Caballeros del Rey Fernando y Caballeros Templarios. La fiesta para festejar el triunfo estaba previsto que se alargara hasta el amanecer.