Las playas de Orihuela Costa son las que más banderas azules han obtenido este año de toda la Comunidad Valenciana, y lo llevan consiguiendo hace tiempo, aunque, paradójicamente, este verano han iniciado la temporada alta sin servicios. Solo el de socorrismo está activo, mientras que los chiringuitos llevan ya 3 meses con el cierre echado y no se han instalado en la arena hamacas ni sombrillas que tanta demandan tienen en esta zona por parte del turismo extranjero. Tampoco, ya a 1 de julio, se pueden alquilar patines acuáticos para dar un paseo por el mar, sin alejarse mucho, ni una moto de agua, para irse más lejos.

Los miles de visitantes que ya hay en las urbanizaciones de Orihuela tienen que planificar su estancia playera de manera distinta a otros años. A falta de chiringuitos, son muchos los que se llevan neveras portátiles para poder tener bebidas frías con las que sofocar el calor, y aperitivos y comida, así como tumbonas y sillas por no haber servicio de alquiler de hamacas, lo que supone un problema para quienes solo están unos días en la zona. Es el caso del matrimonio británico formado por Arthur y Sophie quienes, tratando de hacerse entender con su escaso español, cuentan que se han visto obligados a comprar dos hamacas y una sombrilla «lo que es una molestia porque solo vamos a estar aquí 10 días y luego tendremos que dejarlas en el apartamento que hemos alquilado, porque no nos lo vamos a llevar a Inglaterra», explica Sophie mientras Arthur hace un agujero en la arena para plantar la sombrilla.

La Concejalía de Playas y la de Contratación se dieron cuenta en abril de que el contrato con la anterior adjudicataria había finalizado el 30 de noviembre y seguían explotando los servicios. Playas ordenó su clausura e inició los trámites para una nueva licitación, teniendo en cuenta que esa empresa, Chiringuitos del Sol, se encuentra bajo investigación judicial por el presunto amaño en la anterior contrata y que mantiene procesada a la exedil de Los Verdes, Martina Scheurer.

Recursos

Pero esa mercantil -que se ha vuelto a presentar al concurso- hizo alegaciones porque consideraba que la infraestructura y materiales eran de su propiedad -ya han sido rechazadas-, y hubo recursos al nuevo pliego, en concreto cuatro de dos personas con idénticos escritos y dirección -una de ellas responsable de una de las 6 mercantiles que se han presentado al nuevo concurso-. Estos recursos son los que están retrasando la adjudicación. El Tribunal Central de Recursos Contractuales debe pronunciarse sobre los mismos, y tiene hasta el 22 de julio para hacerlo, por lo que, como mínimo, hasta agosto las playas oriolanas estarán sin servicios.

«Confío en que haya servicios este verano y no cabía en este contrato más que no prorrogar y licitarlo de nuevo a la vista que el juzgado manifestó que hay indicios suficientes de un supuesto delito en su contratación en la legislatura anterior. Soy consciente del malestar al no estar en funcionamiento los servicios de temporada pero como responsable del área considero que era la decisión más adecuada», explicó la edil de Playas, Luisa Boné.

Críticas

La oposición es más pesimista. La portavoz del PSOE, Carolina Gracia, teme que la situación perdure todo el verano. «Orihuela se va a quedar sin chiringuitos todo el verano por una consecuencia política, encima obviando a los técnicos de la Mesa de Contratación que pedían paralizar el contrato» y advirtió que «está perjudicando a la imagen de nuestras playas y puede poner en una situación de riesgo las banderas azules cuando el año que viene se haga la revisión y nos enfrentemos a que les quiten puntos».

Cuestiones que les cuesta entender a los miles de turistas que cuadruplican la población habitual de Orihuela Costa. Dos de ellos son Sergio y Maribel,una pareja zamorana que llega, junto a sus hijos, a la playa de Cabo Roig cargada con una nevera llena de refrescos, cervezas y agua para pasar un día de playa. «El chiringuito que hay en esta playa nos gusta mucho, te permitía tomar un refrigerio mientras los chavales se daban un baño; ahora no renunciamos a ese refrigerio y nos lo traemos nosotros de casa, ya que no hay un bar cercano», señala Sergio mientras observa como una familia se tira en tobogán desde un patín alquilado. Para disfrutar de deportes náuticos y ocio en el mar este verano no queda otra que acudir a alguna de las empresas privadas que los ofrecen.

Más duras se muestran las asociaciones de vecinos de Orihuela Costa. El portavoz de FAOC, Tomás Moreno, señaló que «los responsables de Contratación y Playas han hecho una gestión muy deficiente que ha originado esta situación que es lamentable y muy negativa de cara al turismo y no tenía que haber sucedido en condiciones normales». No obstante, agradeció que los aseos se estén abriendo tras asumir el Ayuntamiento su propiedad.

Por su parte, el presidente del partido de Orihuela Costa, Claro, Román Jiménez, indicó que «el Ayuntamiento está dejando de recaudar 30.000 euros al mes, más el trabajo del que vivían más de 100 familias y perderemos turistas en el futuro, todo por una ineficiencia catastrófica en la que PP y Cs se miran el ombligo de Orihuela centro y han abandonado a los vecinos de la Costa». Mientras siga esta situación, al menos varias semanas más, quienes acudan a las laureadas playas oriolanas deben llevar consigo la nevera y las tumbonas.