A los dos grupos de la oposición de Rojales no les ha gustado ni un poco el proyecto ideado por el gobierno de Antonio Pérez (PSOE) para habilitar una nueva pasarela peatonal sobre el río Segura. La infraestructura está proyectada en la zona que conecta el barrio del instituto y el recinto ferial. Se trata de una moderna instalación que costaría cerca de 600.000 euros. El Partido Popular (PP) y el Partido Demócrata de Rojales (Pader) critican tanto el coste, que tildan de excesivo, como el hecho de que sólo se proyecte para el acceso de peatones en vez de incluir también la posibilidad de que sirva para tráfico rodado.

Los socialistas, que gobiernan con mayoría absoluta, acordaron en el último pleno solicitar ayuda económica a la Diputación de Alicante para sufragar esta obra con cargo al Plan de obras de la Diputación para el ejercicio 2019. En caso de que se apruebe, el consistorio tendría que sufragar una cantidad cercana a los 210.000 euros y el resto correría a cargo de la institución provincial.

El portavoz del PP, Alberto Ros, criticó que las «moderneces que el alcalde quiere construir le cuestan dinero a los vecinos» y consideró «innecesaria una actuación que, en todo caso, podría solventarse con un coste mucho menor». En opinión del edil popular, el regidor «ha presentado una pasarela estilo Calatrava en lugar de una solución estética y económica para no perjudicar a las arcas municipales». Dijo además que no tiene sentido habilitarla a tan solo 150 metros del puente

Los populares consideran que el alcalde «ha cogido mal del altura con proyectos de diseño en lugar de otros útiles y con un menor coste para los vecinos», y consideran más necesaria la construcción de un puente que comunique directamente con la rotonda de Pueblo Lucero para darle un mejor acceso a las urbanizaciones y al polígono industrial La Bernarda.

«El PSOE no atiende las necesidades de los rojaleros y se dedica solo a despilfarrar el dinero para intentar cortar alguna cinta el año electoral con la que tapar cuatro años tirados a la basura», criticó el responsable popular. Es por ello que reclamó al alcalde que «ayude a que sus socios de Compromís en Valencia desbloqueen los 440.000 euros que tiene pendientes Rojales de las ayudas nominativas de la Diputación Provincial de Alicante y que acaben las obras del colegio que están paradas».

Comunicación

Por su parte el portavoz del Pader, Desiderio Aráez, dijo que «lo que se necesita es un puente para el tráfico rodado con acceso peatonal debido al problema de comunicación que se genera en esa parte del pueblo, en cualquiera de las fiestas, sobre todo en las de San Pedro».

Según consideró Aráez «no es suficiente con el puente Reina Sofía y el gobierno local es consciente del peligro que se genera en ese puente en las fiestas de San Pedro los días que no se corta el tráfico. Y también hay que tener en cuenta lo que ocurre cuando se corta la circulación al principio de la Avenida Justo Quesada, que hay que dar un rodeo de varios kilómetros para poder acceder a un lado o al otro del pueblo». «Pensamos que lo que se necesita es un puente con acceso peatonal, que serviría para descongestionar el tráfico pesado que obligatoriamente tiene que pasar por el puente Reina Sofía y circular por la calle Orihuela, que un auténtico cuello de botella en su camino al polígono y al campo de golf».

Por su parte, el regidor socialista defendió su proyecto y dijo que la cantidad económica final se sabrá una vez que se redacte el proyecto, ya que lo que existe hasta ahora es una memoria valorada. Aún así destacó la necesidad de comunicar ambas zonas del casco urbano, donde se montan las kábilas de las comparsas o el mercadillo y transitan muchos vecinos. «La oposición criticar lo iban a criticar de todas formas porque no hacen otra cosa», zanjó el primer edil.