El mercado de los martes de Orihuela abandonará en pocas semanas el recinto de Los Huertos para volver a su emplazamiento tradicional, el entorno de Los Andenes. El concejal responsable de la actividad, Dámaso Aparicio, ya ha firmado el decreto de traslado y solo falta por organizar el nuevo reparto de espacio entre los 200 comerciantes. El gremio ha venido reivindicando durante los últimos años el cambio de ubicación al considerar que era la única alternativa para salvar el zoco, que ha perdido 140 puestos por la falta de clientes.

El traslado del mercadillo hasta la Avenida Marqués de Molins y la calle Luis Barcala ha recibido el visto bueno de todos los departamentos del consistorio, como Infraestructuras, Seguridad Ciudadana o Urbanismo, al estimar que esa ubicación era la mejor posible por seguridad y espacio, pues se precisan 1.400 metros lineales. Además, apenas afectará al tráfico de entrada y salida a la ciudad. Ahora sólo falta que ese cambio sea recogido en una publicación del Boletín Oficial de la Provincia, que se espera para esta misma semana. Aparicio explicó ayer que lo primero que se hará será notificar el cambio a los dos centenares de vendedores ambulantes, algo que se hará la próxima semana. A partir de ahí, se empezará a adecuar el nuevo emplazamiento, pintando la delimitación de espacios en las nuevas calles entre la estación intermodal y el colegio Oleza, así como el pequeño tramo comprendido en Luis Barcala. Después se procederá al reparto, lo que se hará mediante sorteo. De esta forma el mercadillo se montaría de nuevo en torno al barrio de Las Monserratinas, que fue su emplazamiento tradicional hasta hace nueve años.

Según los cálculos de Dámaso Aparicio, el traslado se podría acometer a finales de julio, después de las fiestas de la Reconquista. «Cuanto antes, mejor, ya que en verano hay menos gente y es más fácil resolver cualquier posible problema. El objetivo es que en septiembre esté todo funcionando al cien por cien», aseveró.

La propuesta responde a las insistentes reclamaciones de los mercaderes, que han visto como el que era uno de los principales mercados de la comarca languidecía por la falta de visitantes. El Ayuntamiento sacó el mercadillo de Las Monserratinas en 2009, cuando se empezaron a realizar unas obras en la zona. La administración local se comprometió a que sería una medida provisional, pero sin embargo los vendedores nunca volvieron a ese barrio porque después comenzaron las obras del AVE, ahora finalizadas. El zoco quedó pues alejado del centro tradicional y desde entonces son cada vez menos los vecinos que se acercan para llenar allí el carro de la compra. El concejal de Mercados espera que esa situación se revierta ahora y, según asegura, no sólo cuenta con el apoyo de los vendedores ambulantes, sino también de los comercios y locales de hostelería ubicados en el entorno de Los Andenes, que esperan que el cambio revitalice esta zona.