La marquesina del acceso principal del Hotel Fontana de Torrevieja se vino abajo ayer, afortunadamente, sin causar heridos. El derrumbe se produjo a las 21.05 horas en este céntrico establecimiento situado en la calle Rambla Juan Mateo. Por esa puerta transitan a diario docenas de clientes de este hotel que cuenta con 180 habitaciones y que culminó una reforma en profundidad hace cuatro años.

El derrumbe de la instalación bloqueó el paso de entrada y salida al edificio, por lo que se tuvieron que habilitar otros accesos. Todos los efectivos del parque de bomberos de Torrevieja -un total de 7-, la Guardia Civil y la Policía Local se desplazaron al lugar de los hechos y lo primero que hicieron fue comprobar que no había heridos, antes de analizar el peligro de nuevos derrumbes y establecer un perímetro de seguridad.

Los efectivos de emergencias desalojaron un total de 10 habitaciones que estaban en ese momento con clientes en su interior, cinco en la primera planta y otras cinco en la segunda. Una de las habitaciones ha sufrido desperfectos, la que se encuentra más cerca de la marquesina derrumbada, según informaron fuentes de los servicios de emergencia. El desalojo se produjo de manera rápida, aunque con el normal nerviosismo de quienes estaban sobresaltados por el incidente. Está previsto que una grúa retire hoy la marquesina tras comprobar que no se ha visto afectada la estructura.

Susto

El derrumbe provocó un buen susto para los vecinos y clientes. La estructura cayó a plomo generando un gran estruendo en la calle, -el de la propia instalación y la rotura de la puerta de cristal del hotel- y mucho nerviosismo en los primeros momentos por comprobar si alguien había quedado atrapado. Fueron los vecinos de las casas cercanas quienes, al oír el fuerte ruido, salieron para tratar de ayudar a quienes pudieran haberse visto afectados. Afortunadamente, en el momento del derrumbe, nadie circulaba por la puerta.

El Hotel Fontana, de 3 estrellas, fue construido a principios de los años ochenta. Sufrió un aparatoso incendio hace dos décadas y estuvo cerrado durante varios años tras la crisis económica. Ahora es uno de los más populares de la ciudad.