Los técnicos municipales han valorado el coste del que será nuevo servicio recogida de basura y limpieza de Torrevieja en 16.400.000 euros (IVA incluido) anuales. Lo que supone algo más de 80 millones de euros en el periodo del contrato de cinco años, sin posibilidad de prórrogas. Un precio que no incluye la inversión en la eliminación de basura en el vertedero que se negocia a través del Consorcio Comarcal de Residuos y que cuesta en torno a otros 800.000 euros anuales. La Junta de Gobierno Local aprobó ayer la memoria justificativa del expediente de contratación del servicio de recogida de residuos, transporte a vertedero, limpieza viaria y limpieza y mantenimiento de playas de Torrevieja.

La edil portavoz de la Junta de Gobierno, Fanny Serrano (PSOE), explicó que este trámite, el primero vinculado a la nueva contrata que pasa por junta de gobierno en tres años tras el fracaso del proceso de municipalización, define los elementos del contrato. «Se trata de un contrato de servicios, sin lotes por procedimiento abierto y sometido a regulación armonizada. Es un trámite que exige la nueva ley de contratos del sector público», dijo.

El alcalde, José Manuel Dolón (Los Verdes), ya compareció hace unos días para explicar que el procedimiento se había puesto en marcha una vez aprobados los presupuestos, y que esperaba que la adjudicación estuviera resuelta y en funcionamiento a final de este año. Después de dar cuenta de esta memoria justificativa, el gobierno debe aprobar los pliegos, licitar y adjudicar. Todos trámites que no requieren respaldo del pleno, donde el gobierno no tiene mayoría.

La nueva ley de Contratos da relevancia a los aspectos sociales, medioambientales y de innovación de los contratos. Por lo que el municipio va a exigir los certificados de calidad ambientales y el funcionamiento eléctrico de los vehículos auxiliares en las ofertas. Sin embargo, los datos de la memoria a los que ha tenido acceso este diario, dejan claro que el único criterio de valoración será el económico. Es decir, qué empresa puede ofrecer el servicio con menor coste (y garantías) para las arcas municipales por lo que el coste real puede rebajarse sustancialmente sobre el calculado en la memoria -16,4 millones al año-. Ahora el municipio paga 13, 9 millones al año.

El actual servicio se remonta a un polémico contrato con Acciona de 2004, amañado por el entonces alcalde Pedro Hernández para favorecer a la empresa que finalmente resultó adjudicataria, según una sentencia del TSJ. La contrata agotó los diez años de vigencia y las dos prórrogas en junio de 2016. Ahora realiza el servicio sin contrato en precario y en situación irregular.

Características

Entre las características principales que deberá cubrir el contrato figura que la recogida se realizará mediante un sistema de carga lateral con contenedores georreferenciados en casi todo el término municipal, salvo en las zonas en las que haya contenedores soterrados de carga trasera, mientras que los soterrados de doble gancho se suprimirán.

La memoria justificativa dice que el baldeo de las calles se extenderá a todo el término municipal -el servicio actual lo limita a unas pocas zonas del centro del casco urbano-. Una novedad importante del contrato es que incluye la limpieza de solares municipales y su mantenimiento -ahora hay muchos con problemas de residuos- y la eliminación de graffitis y pintadas en los edificios públicos de la ciudad, además de la elaboración de un inventario exhaustivo de papeleras con el que se elaborará un plan de implantación de nuevas papeleras -la mayoría de las actuales presentan un estado lamentable. El contrato contempla la limpieza de playas en condiciones similares a las actuales y vuelve a incidir en la limpieza a mano de la zona de las calas, algo que en el actual servicio también aparece pero apenas se ejecuta.

Los mismos camiones que realizan la ruta de recogida serán los que transporten los residuos al vertedero definitivo o a las plantas de transferencia; en otras concesionarias se dotan de camiones mayores para hacer el traslado si el municipio cuenta con una planta de transferencia cercana.

El documento, no es definitivo y que puede modificarse en las cláusulas técnicas del pliego de condiciones contempla la creación de un sistema de recogida de papel-cartón puerta a puerta. También de la retirada de podas y enseres domiciliario, previa llamada y un servicio de recogida de pequeñas cantidades de escombro, aceite vegetal y ropa y calzado.

El consorcio del plan zonal de basuras se hará cargo del ecoparque, pero mientras no ponga en marcha su plan de gestión en la Vega Baja será la nueva contrata la que lo asumirá en el actual recinto, con algunas obras, y el respaldo de un ecoparque móvil del Consorcio. El municipio considera que el contrato no debe adjudicarse por lotes porque parte de la mano de obra, maquinaria e instalaciones fijas deben compartirse para los distintos servicios.