Alumnos y profesores del centro de discapacitados Alpe de Torrevieja participaron ayer en un simulacro de incendio coordinado por el Consorcio de Bomberos de la provincia. La maniobra sirvió para revisar el protocolo de seguridad y entrenar a la comunidad educativa para evitar problemas en una situación real. Según los organizadores, el centro superó con nota la prueba.

El operativo se inició a primera hora de la mañana simulando un fuego en el despacho de dirección. Hasta el lugar se desplazaron dos vehículos de bomberos del Parque Vega Sur, un primera salida y una unidad de mando y jefatura. Los bomberos indicaron que el desalojo se produjo de forma controlada, haciendo un recuento de los alumnos para cerciorarse de que todos estaban fuera del inmueble. Lo más importante fue que la evacuación se desarrolló de forma ordenada y rápida. Los simulacros «son esenciales porque se hace una revisión en vivo de todo el protocolo y procedimiento para mejorar el tiempo de respuesta (isocronas) y ensayar con los estudiantes y profesores para evitar que se produzcan situaciones de pánico ante una emergencia real», indicaron desde el Consorcio.