La Guardia Civil ha detenido en Beniaján (Murcia) a un hombre de 34 años acusado de violar en Torrevieja a una joven de 28 años que conoció en una conocida página de contactos y a la que suministró la conocida como «droga del amor» en una cerveza con el fin de consumar la agresión sexual aprovechando los efectos desinhibidores de la metanfetamina. La Guardia Civil no descarta que haya más víctimas del sospechoso, que ha ingresado en prisión tras pasar a disposición del juzgado de Instrucción número 2 de Torrevieja.

Los hechos investigados se remontan al pasado mes de noviembre. La víctima, una joven francesa de 28 años, conoció a un hombre a través de una conocida aplicación de contactos -Tinder- y tras quedar en un par de ocasiones la chica le invitó a cenar en su casa de Torrevieja.

La velada transcurría con normalidad hasta que la mujer, según su relato, comenzó a sentirse mareada, aturdida y desorientada. La joven sólo se había bebido un botellín de cerveza durante la cena, pero la «droga del amor» ya le había hecho efecto sin que ella se diera cuenta.

El hombre presuntamente aprovechó que ella estaba así para ponerse cariñoso con el fin de mantener relaciones sexuales con ella. La convenció de que el alcohol era la causa de su malestar y mantuvo relaciones sexuales con ella, que además se encontraba en un estado de gran desinhibición, por lo que el acto fue consentido. Tras mantener las relaciones sexuales el estado de la chica empeoró y le pidió a su acompañante que la llevara al médico. Sin embargo, en vez de ayudarla le dijo que tenía que marcharse y la dejó sola, por lo que la víctima llamó al 112 para pedir ayuda.

La joven fue trasladada a un centro hospitalario de Torrevieja, donde le realizaron varios análisis para averiguar el motivo de su estado. El análisis de orina toxicológico desveló varios positivos en anfetaminas, lo que alarmó a la joven porque no es consumidora de sustancias estupefacientes. A diferencia de la «burundanga» que se usa también en estos casos para anular la voluntad de las víctimas, la «droga del amor» sí deja trazas en el organismo que pueden ser detectados en las horas posteriores a su consumo.

Sorprendida por el resultado del análisis regresó a su casa acompañada de un amiga y de nuevo volvió a extrañarse. Su acompañante había fregado los vasos y copas de la cena, pero los platos y cubiertos se quedaron en la mesa sin limpiar.

Ante la sospecha de que pudiera haberla drogado para abusar de ella acudió a la Guardia Civil para presentar denuncia. Aseguró que sólo se había bebido un botellín de cerveza y que el hombre le insistió en que se lo acabara. Antes de terminarse la cerveza ya comenzó a encontrarse mal. Por si no era suficiente le prepararon una copa combinada y tan sólo pudo darle un par de sorbos porque no se encontraba bien.Efecto desinhibidor

La denunciante aportó el análisis del hospital y los agentes del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Torrevieja identificaron que se trataba de la llamada «droga del amor», un tipo de éxtasis muy usado en la década de los 70 que tiene un potente efecto desinhibidor que facilita el contacto personal y la empatía, aunque también provoca mareos y desorientación, entre otros efectos.

Los agentes lograron reunir pruebas contra el sospechoso tras dos meses de pesquisas y procedieron a su detención y al registro de su domicilio en Beniaján (Murcia) y de los dos vehículos que utilizaba.

La Guardia Civil intervino en los registros varias cajas de medicamentos que estarían relacionados con la presunta agresión sexual. Asimismo, en su teléfono móvil había gran cantidad de contenido pornográfico que está siendo analizado por si hubiera grabado los hechos denunciados por la joven de Torrevieja.

Los investigadores no descartan que pueda haber otras mujeres que haya sido víctimas del detenido y que hayan sido drogadas sin saberlo para mantener relaciones.

El sospechoso tiene una pareja que le ha perdonado por lo ocurrido y tenía grabado el teléfono de la denunciante, aunque lo tenía bajo un nombre masculino para no ser descubierto.

El arrestado en Beniaján ha ingresado en prisión acusado de los delitos de agresión sexual y contra la salud pública.