Las últimas declaraciones del alcalde de Callosa de segura, Fran Maciá, asegurando que el Ayuntamiento está dispuesto a retirar la Cruz de los Caídos antes de que acabe el año han generado una serie de comentarios que podrían incurrir en delito. El regidor socialista ha denunciado en la Guardia Civil algunas de las opiniones vertidas en redes sociales en las que se anima, directamente, a pegarle un tiro o amordazar y torturar a miembros de Izquierda Unida, formación que está integrada en el gobierno local. El primer edil cree que esas aseveraciones podrían ser constitutivas de delitos de odio e incitación a la violencia.

Lo que Maciá ha pedido al Instituto Armado es que investigue quien hay detrás de los dos perfiles de Facebook que fueron los que realizaron los comentarios. Sucedió el pasado viernes, 10 de septiembre. La Plataforma Ciudadana en Defensa de la Cruz enlazó una noticia en la que se aseguraba que el consistorio prevé retirar el monolito en el próximo mes y medio, lo que generó un aluvión de respuestas. Entre ellas, una a través de un perfil con nombre de mujer que decía «pegarle un tiro a ese alcalde de mierda». Otro de los comentarios, al parecer de un hombre, era el siguiente: «Les volvemos a hacer otra visita relámpago a la sede de IU. Esta vez con un escarmiento. Les amordazamos con pastillas de jabón en la boca y torturamos».

En su denuncia, el primer edil recuerda que con esa amenaza de volver a visitar la sede de IU se podrían estar refiriendo al reciente ataque que sufrió el inmueble. Fue el 27 de octubre y en la fachada del edificio se realizaron pintadas con lemas como «Arriba España» acompañados del yugo y las flechas, siendo este «un símbolo falangista». Esos hechos también fueron denunciados en su día por el grupo político.

Condena

Aunque los comentarios denunciados se hicieron a través del perfil de la Plataforma en Defensa de la Cruz, el colectivo mostró ayer «su condena a este y cualquier otro comentario que insulte u ofenda», declaró ayer el portavoz, Antonio Illán. «Nosotros respetamos la libertad de expresión de las personas siempre en términos de respeto y nunca usando el insulto y la amenaza. De hecho, en cuanto vemos cualquier comentario ofensivo se borra», prosiguió Illán.

La decisión de retirar la Cruz de los Caídos de la Plaza de España de Callosa fue acordada por el pleno municipal en marzo de 2016. El tripartito que gobierna el Ayuntamiento (PSOE, IU y Somos) adoptó esa resolución para dar cumplimiento, según ellos, a la Ley de Memoria Histórica.

El monolito se ubicó en la década de los 40 junto a la iglesia de San Martín y sobre el mármol blanco se esculpió el nombre de José Antonio Primo de Rivera y el de decenas de callosinos. Más tarde se añadieron placas de La Falange.

Aunque el equipo de gobierno intentó retirar la Cruz hasta en tres ocasiones, no lo consiguió. Una parte de los vecinos lo impidió ocupando literalmente la plaza y evitando que pudiera acceder una grúa para desmontarla. Meses después la parroquia de San Martín retiró el nombre de Primo de Rivera y las placas de La Falange, pero el equipo de gobierno sigue con su objetivo. Frente a ellos se encuentra el grupo de callosinos que exige que la Cruz permanezca. El colectivo, que reivindica su carácter meramente religioso lleva ya 327 días haciendo guardias junto al monumento para evitar que el Ayuntamiento se lo lleve. También se ha intentado un acercamiento entre las partes mediante un proceso de mediación que hasta ahora no ha tenido ningún éxito.

Actos vandálicos

En el último año y medio se han registrado continuos actos vandálicos en la ciudad. En diversas zonas se han realizado pintadas a favor y en contra de retirar el símbolo. Por más que han sido borradas, han vuelto a aparecer. Las últimas hace tan solo un par de semanas, cuando la Policía Local pilló in fraganti a tres jóvenes de Orihuela y les impuso sanciones de 200 euros.

La polémica existente en el municipio ha saltado en diversas ocasiones a la palestra informativa a nivel nacional. Primero, cuando los vecinos paralizaron los trabajos para desmontar la Cruz. Después, cuando La Falange organizó una manifestación en el municipio en la que se corearon lemas fascistas y en defensa de la permanencia del monolito.