El Servicio Marítimo de la Guardia Civil de Alicante interceptó ayer por la mañana dos pateras, con 10 y 11 personas a bordo, a unas 13 millas (unos 22 kilómetros, aproximadamente) al suroeste la costa de Torrevieja después de que el patrón de un arrastrero diera aviso a primera hora a las autoridades sobre la presencia de ambos barcos que, al parecer, estaban a la deriva.

A partir de ese momento, la ubicación exacta de ambas embarcaciones fue localizada y rastreada a través del Servicio SIVE, desde el Centro de Operaciones de la Comandancia de la Guardia Civil de Alicante.

Eran las nueve de la mañana y se dio orden para que fueran interceptados por la patrullera de la Guardia Civil y se les dirigieran al puerto más cercano, en este caso al de Torrevieja, donde llegaron cerca de las cuatro de la tarde.

Concretamente al Muelle de la Sal, a bordo de la embarcación Salvamar Mirfak de Salvamento Marítimo. Allí esperaban varias dotaciones de la Guardia Civil, un amplio dispositivo de Cruz Roja y varios miembros de la agrupación local de Protección Civil para colaborar en las identificaciones.

Todos los inmigrantes eran varones, de origen norteafricano y, al menos, había cuatro menores. Según un portavoz de la institución benéfica, presentaban buen estado de salud, aunque algunos tenían un cuadro de hipotermia e hipoglucemia debido a las horas que llevaban en altamar si alimento.

Esta madrugada han llegado al puerto de Torrevieja diez inmigrantes que navegaban en otra patera interceptada en Pilar de la Horadada. Cruz Roja ha movilizado a sus voluntarios para prestarles asistencia.30 caballos

Viajaban a bordo de dos pateras con motores fueraborda de 30 caballos. Los inmigrantes fueron trasladados posteriormente desde el muelle a las dependencias de la Benemérita para comenzar los trámites para su extradición, mientras que de los menores se dio cuenta a la Fiscalía y a la Conselleria de Bienestar Social para que se hicieran cargo de ello.