La plaga del picudo rojo sigue amenazando al segundo palmeral más grande de Europa, el de Orihuela, protegido como Bien de Interés Cultural (BIC). El Ayuntamiento se ha visto obligado a precintar la pista de atletismo del polideportivo, ubicado en ese entorno, debido a que existen al menos dos palmeras afectadas. La clausura se debe a que existe riesgo de que se desprendan. Se trata de una zona que es utilizada por cientos de usuarios, muchos de ellos menores. El concejal socialista Víctor Ruiz criticó ayer la «dejadez» del equipo de gobierno y exigió que se actúe para proteger el entorno y para garantizar la seguridad de los vecinos que acuden a practicar deporte.

El picudo ya arrasó el pasado año al menos 25 ejemplares más de este Palmeral. El Ayuntamiento contrató trabajos para supervisar las palmeras e intentar frenar la reproducción del insecto. Aún así la plaga sigue ahora activa en este espacio verde, tal y como ha quedado en evidencia. Para el PSOE, fue la falta de trabajo y de previsión del equipo de gobierno lo que provocó que un vehículo quedase destrozado el año pasado a causa de la caída de una palmera que estaba afectada por la plaga, mientras que «no se han querido hacer responsables». «Lo que puede pasar en el polideportivo es una desgracia si no se actúa a tiempo», advirtió ayer el socialista.

El concejal de Medio Ambiente, Miguel Ángel Fernández, salió ayer al paso de las críticas del PSOE y aseguró que los dos ejemplares afectados se iban a talar el pasado lunes, pero dijo que no se pudo hacer porque el viento dificultaba la operación. El edil explicó que la contratación se esos trabajos se impulsó en junta de gobierno hace dos semanas y justificó la demora en que, al tratarse de un BIC, hay que obtener primero el permiso de la Conselleria de Cultura. Fernández avanzó que se está redactando un pliego para adjudicar nuevos trabajos para aplicar tratamiento frente al picudo en este espacio y que el objetivo es «que haya cero picudo».

Carreras suspendidas

El cierre de la pista de atletismo no es el único problema que, a juicio del PSOE, está sufriendo el municipio en materia de deportes. Víctor Ruiz criticó ayer que en la última semana se hayan tenido que suspender dos competiciones deportivas. La primera, el 31 de octubre, cuando estaba prevista la celebración de la segunda Oriol Extreme. Pese a que contaba con la autorización de la Consellería de Medio Ambiente, el Ayuntamiento de Orihuela denegó el permiso «por falta de personal». El pasado día 5 de noviembre tampoco se celebró la I Carrera de las Capacidades «porque Víctor Valverde no hizo su trabajo y no procuró tener todos los permisos en regla para garantizar su celebración.

El socialista dijo además que está habiendo problemas con la falta de monitores los fines de semana para el trasporte de las escuelas deportivas y exigió que, tal y como se aprobó en Pleno a raíz una moción del PSOE, el Ayuntamiento disponga desfibriladores en todas las instalaciones deportivas. En ese sentido aseguró que hace unos días una niña sufrió una parada cardíaca en el polideportivo y fue atendida por el SAMU, lo que a su juicio pone de manifiesto la importancia de contar con esos dispositivos.