Red Eléctrica Española (REE) pretende desbrozar más 325.000 metros cuadrados de masa forestal y matorral mediterráneo a lo largo de un «pasillo» de más de cinco kilómetros de las sierras protegidas de Altahona y Escalona, situadas a caballo entre la Región de Murcia y la provincia de Alicante. Ecologistas en Acción y Amigos de Sierra Escalona (ASE) han advertido del grave impacto ambiental que supone esta actuación en zonas bien conservadas de pinar adulto y especies como el palmito, el lentiscos o la coscoja, entre otras.
Pero sobre todo, por el peligro de destrucción de nidos de aves rapaces. La actuación afectaría a la zona de concentración de nidos de búho real más importante de Europa, entre otras zonas de dispersión de muchas aves rapaces protegidas que tienen en las sierras de Altahona (Murcia) y Escalona (Alicante) uno de sus refugios más singulares de la península.
Buena parte de los suelos afectados están protegidos como Zona de Especial Protección par las Aves (ZEPA), Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), y en el caso de la zona alicantina del tendido, están sujetos en estos momentos a un expediente de creación de un Paisaje Protegida, a la que le seguirá otra como Parque Natural.
El objetivo de Red Eléctrica es «limpiar» de vegetación bajo la línea de alta tensión para evitar el peligro de incendio. Esta infraestructura suministra de energía a la subestación de Torremendo (Orihuela), que a su vez satisface la demanda de electricidad de la desalinizadora y el casco urbano de Torrevieja. Estos pasillos, entre apoyo y apoyo del tendido, cuentan con una anchura que oscila entre los 43 y los 79 metros de ancho, según figura en el proyecto, que en alguno de los tramos plantea incluso ampliar esa superficie en varios metros, en función a la adaptación a la nueva legislación de medidas de seguridad contra incendios en los infraestructuras de alta tensión. Una medida que se ampara en el hecho de que la infraestructura «carece de faja de protección».
Carlos Arribas, de Ecologistas en Acción, asegura que se trata de una intervención totalmente innecesaria dada la altura entre la zona a desbrozar y los cables de alta tensión -como mínimo 30 metros-. También recordó la gran dificultad técnica a la hora de abordar los trabajos -en muchas zonas no hay caminos de acceso-. A lo que se suma el hecho de que en los apoyos -las torres eléctricas- situadas entre Murcia y Alicante atraviesan zonas con mucha pendiente.
Las mismas fuentes tampoco terminan de entender por qué se pretende llevar a cabo la actuación ahora por parte de Red Eléctrica cuando la única autorización al proyecto data del 30 de marzo 2015, de la dirección general de Medio Ambiente de la Región de Murcia.
Esa resolución sí tiene en cuenta los periodos de nidificación y cría de aves rapaces -hace una alusión específica a las medidas a adoptar en caso de hallar nidos- y limita el desbroce a los meses de octubre a abril, y fuera de la época de mayor peligro de incendios forestales. En el expediente no figura visto bueno por parte de la administración valenciana pese a que la mitad de los trabajos -aproximadamente 2,5 kilómetros de corredor bajo el tendido eléctrico- discurre en suelo de la provincia de Alicante.
