Sólo tienen un coche patrulla para una Policía Local a cargo de un municipio de 18.000 habitantes y ahora está averiado. El Sindicato de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) ha presentado un escrito de queja ante el Ayuntamiento de Callosa alertando del mal estado que atraviesa su parque móvil, que cuenta con un único vehículo rotulado con más de 12 años de antigüedad.

La organización sindical alertó la pasada semana de que las condiciones de dicho vehículo «dejan mucho que desear, puesto que el motor se detiene sin previo aviso, bloqueando la dirección, con el peligro que eso conlleva en plena marcha». Desde el SPPLB indican que la jefatura cuenta con otros dos coches pero ambos están «sin rotular y sin señales luminosas ni acústicas». Uno tiene más de 11 años y otro casi 19. Quieren saber si estos «cuentan con el permiso de Subdelegación para circular en esas condiciones». Dicen además que esos coches son utilizados por otros funcionarios como los del servicios de Obras.

El sindicato se queja además de que el intendente jefe les está «obligando» a realizar patrullas unipersonales, «colocando en una indefensión al policía, y más cuando estamos en alerta 4 de amenaza yihadista».

El SPPLB ha querido denunciar públicamente que muchas de esas patrullas unipersonales las realizan funcionarios interinos, lo que les parece una «temeridad» porque, además, estos no pueden portar armas. El sindicato dice asimismo que los agentes tienen que acudir a pedanías a más de 10 kilómetros fuera del casco urbano «sin el permiso de intervención para el traslado del arma de fuego» y que tienen que utilizar su teléfono personal puesto que las comunicaciones de radio no alcanzan a esas distancias. Señalan también que se vienen realizando controles o puntos de verificación con cuatro o menos efectivos, «siendo obligatorio seis agentes mínimo para garantizar la seguridad del control».

Los policías se quejan de que a pesar de que han trasladado esta situación al gobierno que preside Fran Maciá, no se ha hecho nada y ni si quiera les han contestado aún siendo el sindicato policial mayoritario. Todo ello mientras no se ha cumplido la promesa de ayudas para pagar los chalecos antibalas de los policías «porque actualmente todos los que hay han sido pagados por los propios agentes».

Por su parte, el regidor dijo que ya está en marcha el procedimiento para adquirir un nuevo coche patrulla y que recientemente se incorporó un 4x4 destinado a la Unidad Rural que cedió el Juzgado de Aguas. «No se rotuló para poder realizar una mejor labor en la huerta». Añadió también que «se ha planteado en la Junta Local de Seguridad la posibilidad de patrullar camuflados para los agentes y oficiales. Pedimos instrucciones y se nos dijo que se necesita un permiso expreso, no habiendo recibido ninguna instrucción en contra para los vehículos».