El viernes 12 de mayo. Esa es la fecha escogida para estrenar el nuevo recinto de mercados, tras una trayectoria de proyectos, obras, paralizaciones por falta de fondos de la Generalitat, modificaciones, trámites y gestiones que se remonta a 2010. Lo anunció, satisfecho ayer, el concejal de Mercados, Javier Manzanares (PSOE). El recinto de 80.000 metros cuadrados acogerá casi 700 puestos que han confirmado su traslado a esta explanada situada junto a la avenida de Delfina Viudes.

Para el edil la culminación de esta gestión permite atender la reivindicación de los vecinos del barrio de Nueva Torrevieja que cada viernes, y desde hace décadas, han soportado los inconvenientes de la instalación semanal: desde la pérdida de aparcamiento el día anterior, hasta la falta de accesibilidad frente a urgencias médicas o emergencias, a los problemas de salubridad, ruido, cierre de viales y limpieza durante toda la jornada del viernes.

El traslado, a juicio del edil, permitirá también reducir la congestión de tráfico que se produce en los principales accesos a la ciudad casi todos los viernes del año. El recinto de mercados, que ha costado más de cinco millones de euros y también está disponible para otros usos -se realizaron actos de fiestas el pasado diciembre-, abrirá sus puertas para los vendedores ambulantes a las 4 de la madrugada para la instalación -el espacio es suficiente para que los vehículos con el género puedan ubicarse junto al puesto de venta-. No podrán acceder más vendedores desde las 8 de la mañana. Los vehículos sólo podrán comenzar a retirarse desde las 14 horas y el recinto deberá estar totalmente vacío a las 15. 30

Servicios

Entre otros servicios, este nuevo espacio, contará con despliegue del grupo de refuerzo operativo (GRO) de la Policía Local, aseos públicos con limpieza periódica durante toda la mañana y hasta la hora de retirada; más de 750 plazas de aparcamiento en el interior, y otras tantas distribuidas en las inmediaciones del recinto; dos paradas de taxi -una en cada extremo del nuevo recinto-; y una nueva línea específica de autobús con 30 paradas en el casco urbano y horario de paso de 30 minutos para acercar a los vecinos al mercadillo. A esta línea «Mercado», se suma la ampliación de la actual línea C que prolonga su recorrido hasta los accesos de la nueva ubicación.

El Ayuntamiento también facilitará pulseras de identificación para niños -el recinto dispone de un parque infantil-. Además se van a distribuir 200 contenedores para que la recogida de residuos sea mucho más ágil. La costumbre, hasta la fecha, es que buena parte de las basuras generadas terminaran sobre la calzada. La ordenanza dice que los vendedores deben «hacerse cargo en la medida de lo posible» de sus residuos. La diferencia, en este caso, es que el mercadillo se va a instalar en un recinto controlado y vallado, y el municipio espera que vendedores y usuarios puedan cumplir unas normas mínimas para mantener la limpieza.

El cambio se realiza sin que la concesión de la cafetería con la que cuenta las instalaciones se haya adjudicado. Además de los aseos y esas dependencias, la zona principal de acceso junto al parque Aquópolis, dispone de dependencias policiales, aunque el edil ha matizado que todos los accesos peatonales estarán abiertos -7 puertas, tanto los que dan a Delfina Viudes, como los situados junto a la zona deportiva en la prolongación de la avenida de Monge y Bielsa.