Diversos grupos de animalistas han iniciado una campaña en las redes sociales para exigir al Ayuntamiento de Orihuela que el Centro de Protección Animal de la ciudad sea gestionado por una protectora y no por una empresa. La movilización llega a raíz del proceso de licitación del servicio iniciado por el Consistorio, que pagará 537.236 euros más IVA a quien se encargue de las instalaciones durante cuatro años.

El colectivo Asociación para la defensa y protección de los animales Asoka el Grande en Orihuela ha asegurado en un comunicado hecho público en Facebook que desde el Consistorio se les ha informado que no podrán seguir gestionando el albergue "a pesar de superar en puntos a la empresa que también se presentó" al concurso de adjudicación. Al parecer el problema existente está relacionado con el criterio para demostrar la solvencia económica de la asociación, aunque el colectivo considera que sí cumple los requisitos exigidos.

"Los voluntarios del Centro de Protección Animal de Orihuela queremos unas instalaciones gestionadas por protectoras, no por empresas. Queremos sacrificio cero, no queremos una perrera", han trasladado a través de las redes sociales vinculadas a Asoka.

Una de las imágenes difundidas por Asoka-Orihuela

Los animalistas están publicando fotos de diferentes animales en los que se exponen sus casos, como una perra llamada Yaya que tiene 12 años, presenta tumores en las mamas y precisa de medicación para el corazón. A este respecto consideran que mantener con vida a un animal así "no es rentable" para las empresas, por lo que su vida correría peligro al poder ser sacrificada.

Mesa técnica

A este respecto, el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, ha dicho esta mañana que el proceso de licitación del servicio lo tramita exclusivamente la mesa técnica que se encarga de baremar los proyectos presentados por aquellos que quieren hacerse cargo del servicio y en la que no intervienen los políticos. El regidor ha avanzado que Asoka ha presentado una escrito solicitando la revisión del proceso y argumentando que sí cumplen con los criterios económicos exigidos.

Bascuñana ha dicho que se ha pedido que se revise todo el proceso porque, al parecer, existen diferencias entre como justifica su solvencia económica una asociación y una empresa "y parece que se podría haber hecho una interpretación diferente". No obstante el regidor ha realizado esas declaraciones "con cautela" puesto que él no interviene en la mesa técnica y por lo tanto no dispone de toda la información necesaria. "Pedimos que se revise a ver si cumple con la solvencia económica antes de que se tome una decisión definitiva", ha proseguido el alcalde.

"Estoy seguro de que en la mesa de contratación van a ser celosos de su responsabilidad y atenderán todas las cuestiones. Ni yo ni ningún político debemos de hacer injerencias en sus decisiones", ha manifestado el regidor.

Emilio Bascuñana ha asegurado que en las últimas horas ha recibido numerosos insultos y descalificaciones a través de las redes sociales y ha dicho que el pliego de condiciones técnicas es el mismo para la empresa o asociación que se encargue del servicio, por lo que "si se dice que no habrá sacrificio de animales es que no puede haberlo".