El concejal socialista Víctor Ruiz se fue ayer al barrio Temístocles Almagro, para, a pie de calle, hacerse eco de las quejas de sus vecinos por el «abandono» al que le somete el Ayuntamiento gobernado por el PP. El edil culpó al área de Infraestructuras y recordó, con cierta sorna, que la concejalía cuenta no con uno, sino con dos concejales: el titular, Paco Sáez Sironi; y el de Ciudadanos, Juan Ignacio López-Bas. Pues ni con esas. Ruiz acudió al barrio hace mes y medio, después de acompañar a Sáez Sironi a un encuentro con los vecinos, para que estos les trasladaran todas sus quejas. «Nuestra oposición pasa también por tener la mano tendida, sin hacer ruido, e intentando resolver los problemas cotidianos de la gente. Se lo pusimos en bandeja», expresó el edil, quien explicó que trató de buscar un solución consensuada y rápida a todas las deficiencias con recursos municipales. «El problema surge cuando, pasados más de mes y medio, el PP no ha dado señales de vida. Los vecinos están desesperados porque ya no saben ni cómo decirlo ni qué hacer. Ya han acudido a la Prensa, a las redes sociales, al PSOE... y el PP sigue tan paralizado como un conejo ante los faros de un camión», aseguró. Los problemas van de la falta de limpieza y mantenimiento de las aceras y zonas verdes a la seguridad. «Los vecinos se han mostrado preocupados por los últimos accidentes por lo que piden la colocación de quitamiedos y la instalación de reductores de velocidad junto al paso de peatones que conecta al barrio», asegura el PSOE en una nota. Ruiz hizo hincapié también en los problemas de tráfico detectados y añadió que los vecinos reclaman una mejora de la señalización que evitara el acceso de camiones al barrio, dado que por la estrechez de los carriles se han destrozado los parterres y aceras en varias ocasiones. Entre otras reivindicaciones, se encuentran también la falta de papeleras y bolardos que impidan a los coches estacionar sobre las aceras o la colocación de pantallas que aíslen a las viviendas del ruido de los trenes o el vallado provisional de un parterre que está siendo utilizado como aparcamiento hasta que se habiliten plazas y zonas verdes.