La lluvia que barrió ayer la provincia dejó a 400 niños del colegio Playas de Orihuela, en el litoral oriolano, sin clase y generaron un socavón de cuatro metros en el municipio de Sax, como sucesos más relevantes. El agua cayó durante buena parte de la jornada y, en la Vega Baja, dejó entre 10 y 20 litros por metro cuadrado, principalmente, en la costa. La tormenta benefició a todos los cultivos del campo.
El centro educativo oriolano se encuentra ubicado desde hace 14 años en barracones y el agua entró por todos los rincones pero, especialmente, por la conducción eléctrica, lo que obligó a la dirección a tomar una decisión tan drástica. La APA criticó ayer el retraso en tener unas instalaciones de ladrillo y el escaso mantenimiento de las instalaciones y aseguraron que los niños sufren enfermedades derivadas de las deficientes instalaciones porque pasan frío en invierno y calor en primavera y otoño.
Hundimiento
En Sax, un repentino hundimiento del terreno obligó a cortar la circulación de vehículos por la avenida Jaime I en sentido Castalla. El amplio socavón, de cuatro metros de profundidad, se produjo en uno de los entronques de la red del alcantarillado donde confluyen las aguas pluviales y residuales. Fue concretamente en la acera, a metro y medio de una academia de idiomas y de un bloque de pisos. No hubo que lamentar daños personales ni tampoco se vio afectado el transitado vial ni los inmuebles próximos. Los operarios continuaban trabajando durante la tarde de ayer para tratar de subsanar el problema antes del sábado.
En cualquier caso, la lluvia caída ayer y el resto de la semana en la provincia ha sido buena para el campo, aunque escasas para poder compensar la larga y extrema sequía que vienen sufriendo las comarcas alicantinas. Todos los cultivos se han visto beneficiados, en mayor o menor medida, y las valoraciones de los responsables de Asaja en las demarcaciones de Elche, Novelda y Orihuela han sido positivas.
Para las hortalizas de invierno el agua, la humedad y el frío siempre favorecen su desarrollo. Y en el caso de los cítricos el árbol se lava, con lo que mejora su rendimiento e hidratación.
El sector de la uva de mesa del Vinalopó, que ahora se encuentra en plena campaña de recolección, también ha recibido con alegría el agua caída del cielo. «Si el temporal se despeja, baja la temperatura y sopla el viento de Poniente la situación será inmejorable. Pero -advierte Pedro Rubira, presidente de Asaja Novelda- si las humedades persisten o la temperatura aumenta podemos tener problemas y alguien no se comerá las uvas de Nochevieja».
También ha sido buena la lluvia para el sector olivarero, que este año se enfrenta a la que es su peor campaña en los últimos 25 años debido a que la sequía ha reducido la cosecha justo a la mitad.
Con todo, las cantidades pluviométricas de esta semana todavía se encuentran muy lejos de lo que haría falta para paliar la sequía en la provincia. Los litros por metro cuadrado registrados en Alcoy han sido 25, Torrevieja, 20, Ibi 18, Alcoleja 17, Agres 16, Novelda y Benillup 15, Onil 13, Orihuela 10 y Banyeres 8 litros. Además, en la cima de Aitana, ya ha caído aguanieve.
