La Confederación Hidrográfica del Segura se niega a rehabilitar las Norias Gemelas de Desamparados, conocidas como Moquita y Pando al no ser de su propiedad y tratarse de una propiedad privada, pese a estar en el cauce del río Segura. Así se lo hizo saber en agosto al edil de pedanías, Víctor Valverde, en respuesta de un escrito del concejal en el que pedía a la Confederación su recuperación dado el «valor simbólico e interés histórico».
El edil pidió que en el caso de que la CHS no quisiera ejecutarlas, delegara en el Ayuntamiento su ejecución subsidiaria, a lo que la Confederación respondió que, en este caso, y al tratarse de una entidad privada, a quien debe dirigirse es a sus propietarios o a la administración pertinente encargada de los Bienes Patrimoniales, ya que ambas infraestructuras están consideradas como BIC.
Sin embargo, el pasado 14 de octubre, hace apenas dos semanas, el alcalde, Emilio Bascuñana, volvió a pedir su rehabilitación junto al edil de Medio Ambiente en una reunión con la Confederación, cuando el organismo ya le había dicho que no eran de su propiedad en el escrito remitido en agosto a Valverde y que «si por parte de quien corresponda se estuviese interesado en proceder a las labores de reparación que sean precisas, no existe inconveniente por parte de este organismo en emitir la autorización pertinente».
Las Norias Gemelas son una infraestructura única en todo el cauce del Segura, y un elemento arquitectónico y patrimonial único. Los vecinos han pedido en numerosas ocasiones su rehabilitación y la limpieza del cauce en este punto -que sí es competencia de la CHS-, con el objetivo de recuperar el paraje de la zona y convertirlo en un elemento más de atracción para el turismo de la localidad, poniendo en valor también la larga tradición agrícola de la pedanía oriolana de Desamparados y de toda la comarca de la Vega Baja.
