La rápida actuación de dos patrullas de la Policía Local evitó ayer un hecho que pudo tener graves consecuencias. Los agentes rescataron a dos menores, uno de tres años y otro de uno, que se habían quedado jugando solos en el balcón de un primer piso, con peligro evidente de caer desde una altura de unos seis metros. Los vecinos vieron al de 3 años incluso subido a una silla intentando encaramarse a la barandilla. Su padre, de nacionalidad sueca, se encontraba en el interior de la vivienda durmiendo. Los hechos se produjeron ayer sobre las 13.30 horas en un edificio del número 6 de la calle Rambla Juan Mateo, en pleno centro de Torrevieja.
Los vecinos y trabajadores de los negocios de hostelería y comercio de esta calle observaron cómo el pequeño estaba en el balcón solo y se subía a la silla. Los vecinos creyeron primero que el pequeño se encontraba solo en casa y le alertaban desde la calle para que se metiera dentro de la vivienda. Desde la calle, la ventana corredera parecía cerrada. Mientras llamaban insistentemente al timbre para intentar entrar en la vivienda, sin recibir respuesta, también alertaron a la Policía Local y los bomberos.
Los agentes no se fiaron de la actitud del pequeño y buscaron una solución para llegar al balcón antes de que llegaran los bomberos.
Gracias a una cuadrilla de albañiles que estaba trabajando en una reforma en el mismo edificio, un policía local pudo hacerse con una escalera y acceder al balcón del primer piso y rescatar al niño. El agente abrió la ventana corredera y halló al padre del menor durmiendo en el salón sin que se hubiera enterado de las llamadas. Los testigos presenciales indicaron a INFORMACIÓN que el menor pudo haber permanecido en balcón durante unos veinte minutos antes de que se diera la alerta.
El camión escalera de los bomberos llegó a la zona instantes después de que la Policía Local hubiera resuelto la situación. El atestado de la intervención ha sido remitido a la Fiscalía de Menores y los Servicios Sociales del Ayuntamiento para que investiguen la posible responsabilidad de los padres. Al parecer, los agentes encontraron la casa muy desaliñada y en la misma había también un perro de raza peligrosa.
