Prometían una juerga mañanera y han cumplido con creces. Decenas de jóvenes de Callosa de Segura han participado hoy en el lanzamiento del chupinazo que da inicio a la jarana que acompaña a las fiestas de Moros y Cristianos. Se trata de un evento relativamente joven, pues es el tercer año que se realiza, pero ha quedado demostrado que gusta, y mucho, por lo que ha congregado a bastantes más comparsistas que en las dos ediciones anteriores. Todo apunta a que su crecimiento será imparable y año tras año irá a más.

Sólo hay que cumplir dos normas para participar en la fiesta: acudir vestido de blanco y con el fajín y el pañuelo del color de la comparsa a la que se pertenece y, por descontado, tener ganar de pasar un buen rato en compañía de vecinos y amigos. Y así ha sido. La jornada ha comenzado con un desayuno en los bares del jardín glorieta y los participantes se han desplazado después hasta la ermita del patrón a ritmo de batucada. Allí arriba, y con el pueblo callosino a sus pies, ha sido el sarraceno Jesús Verdú quien ha encendio la mecha que ha desatado la locura entre los participantes. Por su parte, el pregonero "Desterrao" encargado de dar la bienvenida a los festeros ha sido Jesús Torá.

El chupinazo callosino surgió como una iniciativa de la filá "Desterraos" de la comparsa Caballeros del Cid y ha corrido como la pólvora, y nunca mejor dicho, entre el resto de los grupos festeros. Para integrarlos, los organizadores han decidido que cada año sea una comparsa la que se encargue de disparar el cohete.

La programación de fiestas continúa durante la tarde de hoy jueves con la ofrenda de flores al patrón a las 20.30 horas y a partir de las 23 horas abrirán las kábilas de todas las comparsas.