Las culebras se han convertido en el último fenómeno en la Vega Baja. Si la semana pasada eran vecinos de Torrevieja los que advertían de "ratas y culebras" en solares, este pasado fin de semana han sido vecinos del barrio oriolano de San Antón los que encontraron, en la madrugada del domingo una, en las aceras de unas viviendas cercanas al Palmeral. Allí probablemente tenga su hábitat y se despistara.

El ejemplar era una culebra bastarda cerca de un metro y medio de longitud. El hallazgo se produjo a altas horas de la madrugada en una estampa que se está convirtiendo en habitual y que llamó la atención de los vecinos. Los expertos aseguran que estas serpientes son venenosas pero rara vez atacadas. Sólo si se siente acosadas, pero ¿cómo saberlo?