El impago de varias facturas de combustible por parte del Ayuntamiento de Orihuela llevó esta semana a la compañía adjudicataria del servicio, Repsol, a cancelar las tarjetas de crédito Solred que utilizan todos los vehículos municipales, desde los que corresponden al área de brigadas hasta los de la Policía Local. Así lo confirmó un portavoz del equipo de gobierno municipal que esperaba que el problema, que se conoció el pasado martes, estuviera resuelto a última hora de la mañana de ayer tras 48 horas de negociación y promesas con la empresa... y así fue tras dos días sin poder echar una gota de gasolina en los vehículos.
Esta no es la primera vez que alguien declara moroso al Ayuntamiento de Orihuela, que ya ha tenido problemas, por ejemplo, con Correos, que llegó también a dejar sin servicio al municipio el pasado año. Según confirmó el diario, este no es el único problema de impagos porque otros servicios básicos como la luz o el teléfono se encuentran en una situación muy similar, aunque nadie quiere pensar verse en la misma situación.
El problema subyace en los reparos de intervención principalmente, porque el municipio sigue realizando una mala gestión sin sacar a licitación un concurso público para cubrir el pago de las facturas que se generan por la utilización de estos servicios esenciales. Durante dos días y ante la falta de combustible se elaboró por parte del equipo municipal una especie de sistema para evitar que alguno se quedara tirado, lo cual no ha sido fácil. El problema preocupaba ayer especialmente en la Jefatura de la Policía Local porque se podía acabar patrullando la ciudad exclusivamente a pie si los vehículos se quedaban «secos»; muchos, de hecho, iban en la reserva. El equipo de gobierno se ha comprometido ante la mercantil a evitar que este problema vuelva a producirse.
