Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Torrevieja urge al arquitecto del Teatro a firmar el final de la obra al cabo de una década

Antonio Marquerie no se responsabilizó de que el edificio levantado se ajusta al proyectado

Torrevieja urge al arquitecto del Teatro a firmar el final de la obra al cabo de una década

Una firma. Sólo una rúbrica del arquitecto del proyecto Antonio Marquerie es la que puede facilitar el camino a la reapertura del Teatro Municipal de Torrevieja, clausurado por el equipo de gobierno en septiembre por deficiencias en el edificio que pueden entrañar peligro para los usuarios y trabajadores y que impiden que obtenga licencia de apertura desde su inauguración en 2006. Marquerie fue el responsable contratado para supervisar la construcción del edificio adjudicado a Acciona e incomprensiblemente no firmó el certificado final de obra, aunque sí el acta de ocupación que permitió su inauguración.

El Ayuntamiento ha reclamado en varias ocasiones que el arquitector realice este trámite con el que se responsabiliza del resultado final. Una vez lograda su firma, once años después de que se pusiera en marcha el espacio cultural, el Ayuntamiento podría reclamar a la constructora, Acciona, que adecuase el edificio a las exigencias de seguridad actuales. Existen dos vías para llevar a cabo el procedimiento. La que asuma la primera petición de autorización de apertura que data de 2006 y que por lo tanto no necesitaría cubrir muchos de los requisitos de la actual legislación y una segunda, que se remita al informe de solicitud realizado a través de un técnico contrato por el Ayuntamiento en 2012 y que sí conllevaría un coste mínimo de 200.000 euros, según fuentes municipales.

Esa última solicitud estaba condicionada por el cambio de criterio de la administración tras el accidente del Madrid Arena que endureció el criterio para garantizar la apertura de espacios de libre concurrencia, incluidos los gestionados por la administración pública. Los principales problemas de seguridad en el Teatro se centran en la escalera de evacuación de la zona posterior al escenario y que comunica con las oficinas -también desalojadas en las últimas semanas- y que carece de la presurización adecuada.

Chimenea

De hecho, en caso de incendio, tal y como está concebida ahora, podría provocar un efecto chimenea. Además deben retirarse las dos primeras filas de asientos para dejar espacio en el foso -algo que se hacía ahora de forma puntual quitando las fijaciones del suelo-. La retirada permitiría, si se hace una inversión mayor, recolocar todas las filas del teatro, y dejar más espacio entre filas -la estrechez entre asientos es mayor incluso que la que soportaba el público en el antigo Nuevo Cinema.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats